Barcelona instala dos estaciones de recarga eléctrica sólo para los coches del Ayuntamiento

La cultura de la ecología es una de las premisas del gobierno municipal. Producto de esa circunstancia, el consistorio barcelonés ha contratado en los últimos años hasta ocho coches por renting que funcionan con electricidad: siete eléctricos y un híbrido. Este último es un Peugeot 3008 que está al servicio de la alcaldesa, mientras que seis de los otros vehículos son para los concejales y otro más es un furgón de los servicios técnicos que está adscrito a la unidad de logística y mantenimiento de los talleres municipales.

“A causa de la renovación prevista de los vehículos eléctricos del parque móvil del Ayuntamiento, surge la necesidad de actualizar a la realidad y necesidades futuras las instalaciones de carga de los vehículos, dado que con los nuevos coches, la actual tecnología del parking de Nou de la Rambla no resultaría compatible con los vehículos para poder proveer las baterías”, señala un informe justificativo del Ayuntamiento.

EN RAVAL Y SANT MARTÍ

El consistorio tiene un aparcamiento ubicado en la calle Nou de la Rambla, cerca de la calle Estel, y otro en la calle Perú, cerca de Josep Pla. En ambas ubicaciones, construirá sendas estaciones de recarga de coches: en el Raval, irán 14 puntos de carga con gestión dinámica, mientras que en Sant Martí irán sólo dos puntos.

“Actualmente, en el aparcamiento [de Nou de la Rambla] existe una instalación de cargadores para vehículos eléctricos, los cuales no permiten la gestión dinámica de la carga. Se realizará el desmontaje de los cargadores actuales, que se recuperarán y se almacenarán para disponer de equipos de sustitución en caso de avería de alguno de los nuevos equipos y hasta que este último pueda ser reparado”, indica el informe antes citado.

El Peugeot 3008 de Colau, aparcado en el Ayuntamiento / CG

DIECISIETE OFERTAS PRESENTADAS

Las modificaciones pertinentes para realizar las modificaciones en las instalaciones saldrán por un pico: el contrato, adjudicado el pasado 11 de junio, ha ido a parar a manos de Elecnor, aunque al concurso se presentaron nada menos que 17 ofertas. Finalmente, fue adjudicado por 83.317 euros. Los trabajos de adecuación durarán alrededor de tres meses, con lo que la tarea deberá estar finalizada a finales del mes de septiembre.

Curiosamente, seis de las 17 compañías que presentaron proyecto fueron descartadas en primera instancia por los técnicos municipales, aduciendo que sus ofertas eran anormalmente bajas. Entre esas ofertas se encontraba la de Elecnor. Una de las empresas no respondió a los requerimientos del consistorio cuando éste requirió la justificación del precio anormalmente bajo, pero las demás presentaron sus respectivos pliegos de alegaciones. En tres de esas empresas, los técnicos municipales encontraron deficiencias que provocaron que considerasen sus ofertas no sostenibles o no justificadas económicamente.

REDUCE EL BENEFICIO INDUSTRIAL

Sólo dos compañías fueron aceptadas como posibles candidatas al justificar plenamente sus ofertas. Elecnor adujo que en sus oficinas tenía todo el personal necesario para acometer las obras y que, además, dispone de una oficina técnica formada "por un equipo multidisciplinar". Según este apartado, este último hecho, juntamente con una buena planificación de la obra, tienen como consecuencia una "reducción sistemática de los costes de ejecución". Así se recoge en un informe municipal sobre las “ofertas anormales” presentadas a este concurso.

Para poder ofertar con ventaja, la empresa redujo el beneficio industrial al 6% del proyecto, sin que se viesen alterados los costes laborales. “La oferta presentada contempla un importe de la partida destinada a los desmontajes que incluye el traslado de los residuos a un vertedero autorizado y la completa gestión de la retirada de residuos (…) la empresa también contempla el coste de la gestión de residuos en los costes indirectos del proyecto incluido dentro del desglose de las partidas”, explica el informe del Ayuntamiento. Destacan también los responsables municipales que “las ofertas presentadas de sus proveedores son actuales, alguna incluso haciendo referencia específica al proyecto en cuestión”. Por ello, acaban certificando que “la justificación realizada por la empresa es sostenible económicamente y, por tanto, justificada”.

Elecnor es una multinacional con sede en Madrid, presidida por Jaime Real de Asúa. En su consejo de Administración se sientan, entre otros, Rafael Martín de Bustamante, Ignacio Prado Rey-Baltar, Isabel Dutilh Carvajal, Emilio Ybarra Aranguren, Miguel Morenés Giles o Fernando Azaola. Esta compañía cotiza en bolsa y su cifra de negocios durante el año 2020 fue de más de 2.455 millones de euros.