La gerencia de la Agenda 2030 del Ayuntamiento de Barcelona ha contratado los servicios de una empresa especializada para el asesoramiento y la implementación de mejoras identificadas en la organización, los procesos y el sistema de gestión de las relaciones internacionales. Se trata de sacar el máximo provecho del Plan Director de Relaciones Internacionales, que ya tiene identificadas unas líneas de acción y unos instrumentos que es preciso rentabilizar más.

El objetivo de este contrato es asesorar al personal municipal sobre los procesos identificados, sobre el sistema de gestión, sobre las funciones y responsabilidades del equipo y realizar un acompañamiento y seguimiento del nuevo sistema de trabajo. Tras identificar sus líneas de acción, los responsables municipales detallaron “una serie de propuestas de mejoras, fundamentalmente orientadas hacia un enfoque más marcado hacia los objetivos y desde una perspectiva de trabajo por proyectos. En este sentido, se identificó la necesidad de dotar a los trabajadores de una nueva metodología, especialmente relevante en el momento de implantación del teletrabajo, que facilitase la colaboración a distancia de los equipos, un sistema de seguimiento de la actividad y la asignación de tareas que permitiese definir de manera más cuidadosa y equilibrar las cargas de trabajo”. Así, el resultado final esperado es “la puesta en marcha de una nueva cultura de trabajo de la Dirección de Servicios de Relaciones Internacionales”.

CASI 34.000 EUROS

El contrato, adjudicado el pasado 9 de junio, ha sido para la sociedad Tobalina Consulting Group, propiedad de Àngel Tobalina, que se embolsará 33.940 euros los próximos cinco meses. Tobalina es un empresario versátil con un pequeño holding de consultorías fundado por su padre. Él se graduó en ingeniería industrial en España, Francia y Alemania, para después realizar un máster en el IESE. Su especialidad es la gestión de los recursos humanos de las sociedades “en todos sus ámbitos”.

Cartel de Barcelona Agenda 2030, gerencia sobre la que recae el contrato / AJ BCN



A medio camino entre el independentismo y el liberalismo, en 2013 escribía sobre la “necesaria internacionalización si se opta por la independencia”: “Las opiniones de los empresarios respecto del procés y las consecuencias de la secesión de Cataluña son diversas. Es una opción factible económicamente porque, aunque en un primer momento se romperían las ligazones económicas con el Estado español, pasados unos años, las relaciones se reharían; además, en un mercado global, los productos y servicios catalanes pueden tener múltiples destinatarios. Hoy, Cataluña exporta un 20% de su producción, mientras que los países líderes mundiales destinan al comercio internacional el 30% en relación con el comercio estatal. Ahora bien, si se decide avanzar hacia la emancipación, sería preciso fomentar las exportaciones teniendo en cuenta la pérdida inicial de cuota de mercado estatal”.

RECETAS LIBERALES

En el plano económico, sus recetas se acercan al liberalismo. “Caminamos hacia un modelo de relación laboral a medio camino del actual autónomo y del contratado convencional. En los Estados Unidos y en otros rincones del mundo, ya se está consolidando la figura del colaborador que, mediante el teletrabajo, presta servicios a distintas compañías al mismo tiempo. De esta manera, su trayectoria laboral no está sujeta sólo a la evolución de una entidad, se puede beneficiar del conocimiento de diversas culturas empresariales y puede trabajar en un clima de libertad más grande. En el caso del Estado español, esta situación ya se está comenzando a dar en perfiles ejecutivos como el de director financiero”.

Tobalina criticaba también la falta de seguridad jurídica, “atendiendo a la continua variación de la normativa en materia laboral”, apostaba por “el pragmatismo en la toma de decisiones sobre temas de recursos humanos” y reclamaba un cambio radical en materia de flexibilidad laboral: “Desde mi punto de vista, el primer gran paso sería subvertir socialmente el actual sistema de valores, basado en la estabilidad laboral y el trabajo por cuenta de terceros, para enaltecer a la emprendeduría. En segundo lugar, sería preciso establecer una regulación laboral que promoviese verdaderamente la flexibilidad por parte del trabajador y del empresario”.

En el Ayuntamiento, su firma será la encargada de los procesos de identificación e implementación de los procesos de trabajo, con la asignación de tareas, gestión de la información y el conocimiento, clasificación de las tareas, definición de la estructura de cada uno de los equipos municipales, definición de las funciones y responsabilidades específicas en cada proyecto y acompañamiento y seguimiento de la implementación del nuevo sistema de trabajo por parte del equipo. A la licitación de este contrato acudieron cuatro compañías y Tobalina Consulting fue la que presentó, por sólo 300 euros, el presupuesto más económico y el equipo técnico con más experiencia.

Noticias relacionadas