El pleno municipal de Barcelona ha aprovado, este jueves, las Ordenanzas fiscales de 2022 con los votos favorables de los grupos del gobierno de coalición, la abstención de Barcelona pel Canvi (actualmente Valents), Marilén Barceló y ERC, y el voto contrario del resto de grupos.
Con esta aprobación, se confirma la congelación general de los tributos en la capital catalana para el próximo año.
"INCUMPLIMIENTOS"
Ernest Maragall, líder de ERC en la ciudad, ha insisitdo en que los barceloneses "merecen saber" qué soluciones ofrecerá el gobierno municipal ante las problemáticas que golpean la ciudad, como la nueva ola de la pandemia o el difícil estado de la movilidad en la capital catalana.
La portavoz de Junts, Elsa Artadi, ha mostrado una oposición absoluta a los tributos del próximo año, y ha cargado contra los incumplimientos del gobierno respecto al "impuesto turístico", la recogida puerta a puerta y el mantenimiento de la notable subida del "IBI".
Luz Guilarte, líder del grupo municipal de Ciutadans, ha lamentado la "consolidación del impuestazo" en Barcelona, con una "imposición de los intereses partidistas por encima de los barceloneses". La concejal ha expresado que se habrá "más impuestos para más bloques de hormigón pintadas sin sentido y tranvías que no ha pedido nadie", al mismo tiempo que se reducirán "servicios".
"SERVICIOS DE TERCERA"
El líder popular en Barcelona, Josep Bou, ha remarcado la "nula voluntad de negociación" de un "gobierno opaco", y ha criticado el aumento tributario anual y el mantenimiento de la "fuerte subida del IBI" y los impuestos "turísticos", así como la vigencia de la "controvertida tasa de recogida creada en 2020". El regidor del PP ha insistido en una "fiscalidad más elevada" marcada por el tributo metropolitano, el impuesto de circulación y la zona azul, entre otros, y ha subrayado que "las tasas de Barcelona son de primera con unos servicios de tercera".
La portavoz de Barcelona pel Canvi (Valents), Eva Parera, ha celebrado la "rebaja de la presión fiscal" que se ha conseguido parcialmente en la capital catalana, pero ha adevertido que "congelar no es suficiente" y ha apostado por "bajar la carga impositiva a los ciudadanos". Marilén Barceló, regidora no adscrita que trabaja junto a la formación de Parera, ha suscrito esta intervención.
El primer teniente de alcaldía, Jaume Collboni, ha agradecido el "tono constructivo de Barcelona pel Canvi", y ha defendido la congelación fiscal. "Pagamos 200 euros menos por habitante en Barcelona en relación a Madrid, y recibimos 250 euros más en gasto social", ha recordado.