Cs tarda nueve meses en recibir la resolución del Comité de Ética sobre la pareja de Lucía Martín
El dictamen es de abril de 2021 y al partido le ha llegado este enero: Alicia Ramos dejó el Ayuntamiento el pasado junio
1 febrero, 2022 10:53Noticias relacionadas
Ciutadans ha tardado más de nueve meses en recibir la resolución del Comité de Ética del Ayuntamiento de Barcelona sobre la contratación de Alicia Ramos como personal de confianza, en septiembre de 2020 (según la fecha de publicación en la Gaseta municipal, el boletín oficial del consistorio), y por aquel entonces la pareja de la regidora de Barcelona en Comú, Lucía Martín. El Comité de Ética concluye que el nombramiento de Ramos "daña el el prestigio y la imagen de la institución", según el Código de Ética y de Conducta del Ayuntamiento de Barcelona.
Mariluz Guilarte, presidenta del partido naranja en el Ayuntamiento, presentó la queja por la contratación ante el Comité de Ética el 22 de septiembre de 2020, cinco días después de que el nombramiento de Ramos apareciera en la Gaseta municipal con efectos del 14 de septiembre. La resolución del Comité de Ética, contraria a los intereses de Colau, es del 6 de abril de 2021 y Ciutadans no la recibió hasta el pasado viernes, 28 de enero de 2022, más de nueve meses después de que se emitiera, afirman fuentes de Ciutadans. Según la formación, a mediados de la semana pasada les dijeron que tenían una carta certificada del Comité de Ética, que recibieron el día del pleno.
ALICIA RAMOS DEJÓ DE TRABAJAR EN EL AYUNTAMIENTO EN JUNIO DE 2021
Por el camino han pasado más cosas. Fuentes del departamento de prensa del Ayuntamiento de Barcelona han explicado a Metrópoli que Ramos, que también ha sido diputada en el Congreso de los Diputados, dejó de trabajar en el consistorio en junio de 2021. No se concretan los motivos de la salida, pero se produce unos dos meses después de que el Comité de Ética emitiera su resolución, que fue el 6 de abril de 2021. Este lunes, este medio comprobó en la página de transparencia municipal que el nombre de Ramos ya no aparece.
En declaraciones a Metrópili, Guilarte cree "que es una anomalía el tiempo que el comité ético ha tardado en trasladar a nuestro grupo la resolución al tema que pusimos en su conocimiento. Creemos que una de las razones puede haber sido la falta de información por parte del gobierno municipal que habrá puesto trabas para avanzar en dicha resolución al tratarse de un tema que afectaba directamente a una concejal del equipo de gobierno de Barcelona en Comú. Una vez más, con nuestra denuncia, ha quedado claro y demostrado el nepotismo con el que actúa el gobierno municipal, saltándose cualquier valor ético, incluido su propio código, y por otra parte el déficit tan grande en transparencia y rendición de cuentas del que carece dicho gobierno municipal".
La queja de Guilarte exponía que el nombramiento de Ramos como asesora 3, en régimen de dedicación plena, adscrita a la cuarta tenencia de alcaldía "venía a ser un modus operandi institucionalizado en el Ayuntamiento de Barcelona consistente en nombrar personas con relaciones familiares o de afectividad como personal eventual de confianza, una práctica de la que se habría beneficiado Alicia Ramos". Como asesora 3, Ramos podía tener un sueldo bruto anual de unos 56.000 brutos euros anuales, aunque en aplicación del código ético de su partido podía percibir un sueldo neto algo por encima de los 2.000 euros en 14 pagas.
EVITAR LAS CONTRATACIONES CON "CONFLICTO DE INTERÉS"
En un primer momento, el Comité de Ética dice que el caso de Ramos "se podría tratar a primera vista de un conflicto de interés", algo "reprobable" por la normativa municipal a la que se hace referencia. "Avala este supuesto el hecho de que, consultado el expediente administrativo, no consta ninguna razón ni ningún documento por el que Ramos fue nombrada. Además, es conocido que la regidora, la responsable de la tenencia de alcaldía y la beneficiaria del nombramiento son del mismo partido".
Sin embargo, con posterioridad el Comité de Ética recuerda los nombramientos de los cargos del personal eventual corresponden a la alcaldesa, y en este caso Colau no tiene vínculo familiar de ningún grado ni relación personal comparable con la persona por ella misma designada, "quedando así libre de reprobación por un posible conflicto de interés en la designación del cargo de referencia".
Ahora bien, el Comité de Ética cree que el nombramiento de Ramos, por la relación que tenía con Martín, ofrece "una imagen negativa de la institución pública a la que ellas pertenecen", y recomienda al gobierno de Colau que en un futuro se evite el daño a la imagen pública y al prestigio del Ayuntamiento "derivado o asociable a casos de real o potencial conflicto de interés en el nombramiento de cargos del personal eventual".
"NEPOTISMO DE LA ALCALDESA IMPUTADA"
Para la presidenta de Ciutadans en el consistorio, el citado es "otro ejemplo del nepotismo de la alcaldesa imputada. Utilizar su cargo y al Ayuntamiento para dar privilegios y favorecer redes clientelares con el dinero de todos los barceloneses. No es "ni ético ni responsable". Colau tendrá que declarar el 4 de marzo como investigada por presunta malversación, prevaricación y tráfico de influencias por beneficiar con dinero a público a entidades afines. Colau no cree que tenga que dimitir por la imputación. "Quedará en nada", dijo.
A pesar de la clara resolución del Comité de Ética, fuentes municipales aseguraron que no se cuestiona el nombramiento "sino que señala un aspecto puramente formal: que el currículum tiene que figurar en el expediente y no solo en el portal de transparencia". También indican que Ramos, adscrita a la concejalía de Feminismos, reunía la preparación y conocimientos necesarios y acreditados: licenciada en Derecho, doctora en Humanidades por la Universidad de California y máster en Cultura Histórica, Comunicación y Nuevas Profesiones. También había sido profesora de las universidades de Cambridge y California. Y sostienen que su nombramiento se hizo siguiendo los mismos criterios de todos los eventuales de todas las formaciones políticas.