Colau o Collboni: ¿Quién domina el relato en el gobierno de Barcelona?
Expertos en comunicación y ex responsables en gobiernos locales señalan las diferencias entre los comunes y el PSC en la gestión de la ciudad
10 mayo, 2022 00:00Noticias relacionadas
En una coalición de gobierno, ¿quién impone el relato? En el Ayuntamiento de Barcelona se ha generado una disputa entre el discurso de Ada Colau, con medidas como las superillas o el urbanismo táctico, y las medidas económicas que propone el primer teniente de alcalde, el socialista Jaume Collboni. ¿Quién traslada mejor su mensaje?
Metrópoli ha organizado un debate para analizar esa cuestión, --días antes de la renuncia de Elsa Artadi al frente de JxCat-- con los exresponsables políticos Alberto Fernández y Joan Rangel y los expertos en comunicación Toni Aira y Sílvia Cóppulo. El denominador común de todos ellos es que Colau “está en todas partes”. “Me quito el sombrero”, señala Cóppulo, directora de El divan, en Catalunya Ràdio.
Toni Aira, profesor de Comunicación Política (UPF-BSM), rompe el juego. “Colau tiene una gran capacidad comunicativa, y se dirige a un target muy claro, que la sigue. Lo que puede ocurrir en los próximos meses es que ella deje los activos tóxicos de la gestión a Jaume Collboni, y se aproveche de un hecho y es que la política pasa por mucha gente sin que se puedan centrar en los detalles. Es decir, mi madre, que vota siempre, no sabe quién se encarga del área de seguridad, por ejemplo”.
Lo que ocurre, y en eso Collboni va por detrás, es que la alcaldesa sabe “colocarse en el sitio adecuado”. Lo analiza Sílvia Cóppulo, que constata que Colau “siempre sabe decir a otros que arreglen las cosas, (pedir más dinero para transporte público al Gobierno central), o ponerse al lado de los más débiles, los que no pueden pagar la hipoteca”.
DECISIONES ESTRATÉGICAS
¿Qué hacer, entonces, desde la perspectiva de Collboni? Cóppulo incide de nuevo en la estrategia que debería seguir el dirigente socialista. “Ahora no nos acordamos de Artadi, no sabemos lo que hace, o que Ernest Maragall ganó las elecciones. Pero sabemos que Colau quiere ‘pacificar’ las calles, con las superillas. Yo, que vivo al lado de una de ellas, no entiendo ese lenguaje belicista, porque no sé qué hay que pacificar. El problema es ahora, que no sé por dónde debo caminar. Es decir, Collboni debería apuntarse a las cosas cercanas, las que se pueden tocar”.
¿Cómo destacar en un gobierno de coalición? Alberto Fernández insiste en la grieta que existe entre los dos socios. “Es estratégico para el partido salir del gobierno, no tanto por la gestión de Collboni, con un balance, como responsable del área de promoción económica, que es difícil de criticar. Es el poli bueno, pero ha mandado la señora Colau”.
Joan Rangel cree que el elector valorará el trabajo hecho y votará a la persona, en detrimento de las siglas, siguiendo su experiencia como primer edil en Caldes d’Estrac, donde él ganaba en un territorio que dominaba CiU. “Creo que se valorará la capacidad de comprometerse”, señala.
Pero, ¿habrá alternativas, combinaciones posibles para que el PSC tenga la alcaldía? Sílvia Cóppulo tiene claro que “todo es posible”, también un acuerdo del PSC con JxCat, aunque lo ve “poco probable”. Recuerda que siempre puede haber imponderables. Y discrepa de Rangel. “No estoy de acuerdo con Joan, porque se ha votado a partidos, lo que pasa es que Colau ha logrado que se hable de ella a partir de cualquier tema, con un enorme nivel de notoriedad”.
¿NUEVOS CANDIDATOS?
Toni Aira se refiere a lo que puede llegar. “Las municipales son importantes, porque anticipan escenarios de las autonómicas, por ejemplo, como pasó con el primer tripartido, con acuerdos previos en los municipios. Y luego habrá que conocer quién se presenta, si Sandro Rosell, Santi Villa u otros candidatos, también habrá que ver Maragall, porque va por barrios y dentro de ERC hay diferencias. Y la misma Colau podría dejar paso a su número dos, Jordi Martí, que ya lo es en la práctica. O Josep Bou, en el PP, que no está nada claro que continúe”.
Muchas incógnitas todavía, pero con el convencimiento, por parte de los cuatro participantes en el debate, que Colau impone su discurso sobre el de Collboni.