La entrada en vigor de la rebaja de los precios del transporte público ya ha tenido los primeros movimientos políticos en un intento de sacar tajada electoral. Cuatro días después de la puesta en marcha de los nuevos importes, personas vinculadas a Barcelona en Comú repartían este lunes unos trípticos en los accesos de la estación de Catalunya. En ellos se podía leer: "Anar amb transport públic té premi. Rebaixes del 30, 50 y 100%. Ofertes vàlides del 1 de setembre al 31 de desembre", dice el texto del folleto, que incorpora el logo del partido de Ada Colau en la primera página.
A menos de nueve meses para las elecciones municipales de 2023, en Barcelona en Comú parecen estar ya de precampaña. De hecho, no es la primera vez que este año la formación política hace una acción de este tipo. En mayo, por ejemplo, hizo lo propio con la obra gobierno del consistorio en Gràcia. Por el momento, las encuestas no son favorables a Colau salvo, curiosamente, el Barómetro municipal, que elabora el Ayuntamiento barcelonés. Y la posible irrupción de Xavier Trias puede hacer todavía más dificil que la alcaldesa reedite un tercer mandato.
Folleto de Barcelona en Comú sobre la rebaja del transporte público
MEDIDA APROBADA POR EL CONSEJO DE MINISTROS
La aprobación de la rebaja de los precios del transporte público fue anunciada a principios de verano por el presidente de Gobierno español Pedro Sánchez y fue aprobada por el Consejo de Ministros el 1 de agosto. La medida fue respaldada por el Congreso de los Diputados el 25 de agosto. Prevé la gratuidad de los abonos de Rodalies y de media distancia de Renfe siempre que se hagan 16 viajes o más y la reducción de los precios del resto de transportes integrados en un 30%.
En el caso del área de Barcelona, el 20% restante hasta el 50% de la rebaja que se ha implantado la ha asumido la Autoritat del Transport Metropolità (ATM), un consorcio interadministrativo presidido por la Generalitat del que también forman parte el Ayuntamiento de Barcelona y el Área Metropolitana de Barcelona (AMB). Fuentes del ATM subrayan que la última palabra en las decisiones las tiene la Generalitat porque controla el 51% del consorcio.
El vicepresidente del AMB, Antoni Poveda, lo explicaba el otro día con mucha claridad. "Esta medida parte de la iniciativa y apoyo financiero del Gobierno central, y posteriormente ha sido complementada, cofinanciada y gestionada por las administraciones catalanas que forman la Autoritat del Transport Metropolità (ATM): la Generalitat de Catalunya, el Área Metropolitana de Barcelona y el Ayuntamiento de Barcelona".
Imagen interior del folleto de Barcelona en Comú sobre el transporte público
COLAU PIDIÓ LA REBAJA DE LA T-USUAL A FINALES DE MARZO
A finales de marzo, Colau propuso la rebaja del precio de la T-Usual durante tres meses, una posibilidad que en su momento la Generalitat rechazó. En la última hoja del folleto, Barcelona en Comú reconoce que la iniciativa es del Gobierno español aunque lo hace de tal forma que no da lugar a muchas interpretaciones: "Tal com l'alcaldesa Ada Colau va exigir al març hem aconseguit que el Govern de l'Estat rebaixi el preu del transport públic". Unas líneas más abajo, la propia primera edil hace suya la victoria: "Celebro que s'hagi recollit la nostra proposta".
Parece que la influencia de los comunes sobre Pedro Sánchez no tiene límites.