Un fiasco, porque se trataba de lucir un manifiesto con el apoyo de unas 50 personalidades de distintos ámbitos. Ernest Maragall calculó mal, “hubo una confusión”, según ERC, y hasta cuatro supuestos firmantes de una proclama de apoyo a su candidatura han mostrado su rechazo y su malestar. Se trata de Jordi Amat –anunciado por un comunicado de Esquerra, aunque él mismo reaccionó de inmediato y negó que diera apoyo a la candidatura y no asistió al acto, en la Casa Rius—de Ramón García-Bragado, Enric Morist y Alberto Guijarro.

¿Qué ha sucedido? Una “confusion”, se señala, porque el partido se puso en contacto con todos, se asegura, y los interlocutores mostraron la posibilidad de asistir al acto. Pero de ahí a fijarlos en un comunicado como integrantes del manifiesto hay un trecho.

Ernest Maragall, en el acto de ERC para presentar los apoyos de 50 personalidades / EP

Las posibles ‘altas’ al proyecto de Maragall eran importantes. Se trataba de Ramon García-Bragado, que fue teniente de alcalde de Urbanismo en gobiernos municipales socialistas, una pieza fundamental en el consistorio de Barcelona, que ayudó a la transformación de la ciudad. También se había añadido a Alberto Guijarro, director del festival Primavera Sound, fundamental en los últimos años en Barcelona.

¿PRECIPITACIÓN?

Los otros dos son Enric Morist, del coordinador de la Cruz Roja en Catalunya, y el escritor y ensayista Jordi Amat, columnista en el diario El País, y coordinador del suplemento cultural en catalán El Quadern.

Hay muchos otros integrantes en ese manifiesto, y Maragall trata con todos ellos de exhibir una fuerza en la sociedad civil que le permita alcanzar la alcaldía de Barcelona. Pero esas ‘bajas’, que los propios afectados han manifestado, en las últimas horas, muestra una cierta precipitación, o la idea de buscar a cualquier miembro activo en Barcelona que pueda prestar un apoyo a Maragall.

La irrupción de Xavier Trias como alcaldable de JxCat, ha distorsionado los planes de ERC. La estrategia ha cambiado y Maragall necesita ahora una reacción. Con el lema de ‘Maragall més que mai’, el alcaldable republicano quiere evocar la imagen del margallismo, en el momento en el que tuvo más éxito, con su hermano Pasqual como alcalde, para que Barcelona recupere todo su brillo.

CONSEJO DE SABIOS

Entre los que siguen dando apoyo al manifiesto de Maragall, --si no expresan lo contrario en las próximas horas—se mantiene el músico Joan Chamorro; la arquitecta Maria Sisternas; el director del Barcelona Institut of Science and Technology, Eduard Vallory; la presidenta de la Fundación Roble, Llum Delàs, además de otros ex socialistas, que ya llevan tiempo fuera de la órbita del PSC, como Fabián Mohedano.

A esas personalidades hay que añadir el llamado consejo asesor, formado por los consejeros Joaquim Nadal y Carles Campuzano, el ex consejero Raül Romeva, el jurista Joan Queralt o Josep Caminal, que fue director general del Liceu, consejero de presidencia del Grupo Godó, y ex concejal de CiU.

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