El pleno municipal del pasado mes de febrero contó con la presencia del Síndic de Greuges de Barcelona, David Bondia. El defensor de los barceloneses se personó en la sesión para presentar el informe de la Sindicatura de 2022. Durante su exposición, Bondia ofreció datos como las "1.544 intervenciones" que se llevaron a cabo el año pasado, un "18,6%" de las cuales en el distrito del Eixample.
El síndic también señaló que se realizaron "459 resoluciones", e instó al Ayuntamiento a dar respuesta a peticiones como "acelerar la retirada del amianto de la ciudad, mejorar la accesibilidad y agilizar el empadronamiento de personas sin vivienda fija", entre otras.
Tras su intervención, Bondia fue objeto de críticas desde diversos grupos de la oposición, pero también lo fue la alcaldesa, Ada Colau, y su gestión al frente del Ayuntamiento de Barcelona. Uno de los reproches fue la excesiva tardanza del gobierno municipal en dar respuesta al síndic, lo que provocó un retraso en los dictámenes de prácticamente dos meses.
RESOLUCIONES EN UN MES
La capital catalana cuenta, desde junio de 2021, con la Carta de Servicios y Principios de Actuación de la Sindicatura de Greuges de Barcelona, un documento que regula la acción de este órgano y establece los derechos y deberes del mismo.
El escrito explica que, cuando la Sindicatura ha admitido a trámite una queja, el síndic puede "requerir información al Ayuntamiento". Cuando ésta ya se ha recibido y se han hecho "todas las actuaciones de investigación y estudio que se crean oportunas", se tiene que emitir una "resolución que se comunica a la persona o personas interesadas y al órgano competente del Ayuntamiento en el plazo medio de treinta días hábiles".
La demora en la respuesta municipal a las peticiones de la Sindicatura ha provocado que, tal y como se desprende del informe de Bondia, la "media de tiempo entre la recepción de información del Ayuntamiento y la emisión de la resolución" se haya establecido en "86 días" durante 2022, lo que supone un retraso cercano a los dos meses.
REPROCHES AL AYUNTAMIENTO
Además de las cuestiones ya referenciadas, el síndic insta al Ayuntamiento en su informe a actuar "diligentemente en la comprobación y tramitación de los expedientes disciplinarios por contaminación acústica con el objetivo de evitar afectaciones más graves a la ciudadanía".
Bondia también apunta la necesidad de "incrementar las oportunidades de ocio juvenil, especialmente nocturno, para ofrecer alternativas a prácticas de ocio en el espacio público que afectan el derecho al descanso del vecindario". En este aspecto, reclama que se combinen actuaciones "preventivas y de reducción de riesgos, socioeducativas y de mediación".
El síndic hace especial hincapié en "garantizar la eficacia de la administración municipal". Para ello, reclama al consistorio "redimensionar las plantillas de técnicos municipales de licencias de los distritos, así como los servicios de atención a la ciudadanía". En esta línea también exige al Ayuntamiento "facilitar a la ciudadanía y equipos profesionales el contacto personal y fluido con los técnicos municipales, así como revisar los criterios y procedimientos que se utilizan para garantizar una mayor agilidad en la tramitación administrativa".