Barcelona compra 170 viviendas públicas "para evitar la privatización": Inversión de 10,7 millones

El Ayuntamiento de Barcelona ha comprado 170 viviendas públicas de alquiler protegido de la empresa pública Regesa con una inversión de 10,7 millones de euros. Según ha explicado la concejal de Vivienda, Lucia Martín, este martes, 14 de marzo, los pisos pertenecían al antiguo Consell Comarcal del Barcelonès y se han adquirido "para evitar la privatización".

Estas viviendas están repartidas en tres fincas, situadas en la calle Mare de Déu del Port, en el barrio de la Marina; en la calle Teodor Llorente, en el Guinardó; y en la calle de la Selva, en Nou Barris.

Actualmente todos los pisos se encuentran ocupados, de manera que más de 300 inquilinos pasarán a formar parte del parque público municipal "de manera estable y definitiva".

CEDIDO POR 75 AÑOS

Las viviendas se construyeron en suelo municipal cedido a la empresa comarcal por 75 años y les quedaban entre 15 y 17 años de protección pública, por lo que después se podrían haber comercializado libremente durante varias décadas.

Por eso, el Ayuntamiento ha llevado a cabo la compra para ampliar el parque público de viviendas y consolidar la condición de vivienda pública protegida de estas promociones.

SEGUNDA OPERACIÓN DE ESTAS CARACTERÍSTICAS

Se trata de la segunda operación de estas características en este mandato, después de que a finales de 2021 el consistorio comprara 198 viviendas de la sociedad pública, una estrategia para evitar la privatización.

En ese sentido, Martín ha afirmado que están dando "estabilidad y tranquilidad" a los inquilinos garantizando precios asequibles e impidiendo la privatización. "Usaremos todas las herramientas que el Ayuntamiento tiene al alcance para ampliar el parque público de alquiler de la ciudad", ha añadido Martín.