Nueva denuncia contra Ada Colau. La organización internacional The Lawfare Project la ha demandado por antisemitismo. Se trata de una asociación sin fines de lucro que tiene el objetivo de proteger los derechos humanos y civiles de las comunidades judías y proisraelíes, unos derechos que considera que la alcaldesa de Barcelona ha vulnerado al romper, de manera unilateral, las relaciones con Israel.

El pasado 8 de febrero, la líder de los comunes anunció el fin del hermanamiento con Tel Aviv, así como la suspensión temporal de la capital catalana con el país de Oriente Medio. Para argumentar su decisión, la alcaldesa aseguró que Israel violaba, de manera sistemática, los derechos humanos. Para finalizar su polémica intervención, animó a otros alcaldes a que se sumarán a romper lazos con Israel repitiendo el lema de la campaña de boicot, "Barcelona dice no al apartheid".

"GRAVÍSIMO ERROR"

Laia Bonet, teniente de alcalde de Relaciones Internacionales, indicó que la decisión tomada a golpe de despacho era un "gravísimo error". "Barcelona no rompe sino que "suma. Somos la capital del mediterráneo y, como capital del mediterráneo, nos sentamos a hablar con todas las ciudades", afirmaba la edil socialista.

Laia Bonet, concejal de Relaciones Internacionales de Barcelona / LAIA BONET

Brooke Goldstein, máxima responsable de The Lawfare Project, asegura que "la suspensión de las relaciones con Israel representa un uso indebido total del proceso legal para participar en una campaña intolerante y partidista, en lugar de una decisión legal en el ámbito del poder de la alcaldesa de Barcelona”. Esta decisión, según sus palabras, no solo afecta al buen nombre de la ciudad de Barcelona, sino que desborda las limitadas competencias de los ayuntamientos en el ámbito de la cooperación internacional.

"Imagino que a Colau le gustaría que Barcelona fuera similar a una ciudad-estado capaz de boicotear a Israel y de llevar a cabo su propia política exterior, pero por desgracia para ella y para fortuna de los barceloneses, legalmente no es así", explica Ignacio Palacios, miembro del Instituto Barcelona y también miembro del abogado contratado por The Lawfare Project.

"PERTURBA LA POLÍTICA EXTERIOR"

"Al adoptar los postulados de una campaña política partidista y discriminatoria contra Israel, la señora Colau incumple el deber institucional de neutralidad del alcalde, perjudica el buen nombre de la ciudad de Barcelona y perturba la política exterior de España”, explica Maxo Benalal, presidente del Instituto de Barcelona.

The Lawfare Project explica que la demanda la han presentado a los Juzgados de Barcelona y que, independientemente de la campaña electoral y de los resultados del 28 de mayo, seguirá su curso.

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau / EUROPA PRESS

DISCRIMINACIÓN ANTISEMITA

Esta podría no ser la única denuncia contra Colau por este tema. La organización Acción y Comunicación sobre Oriente Medio (ACOM), asociación que promueve la relación entre España e Israel, ha anunciado que emprenderá acciones legales contra la alcaldesa y el gobierno municipal por su "discriminación antisemita".

Esta semana han aparecido unas pintadas en la Gran Sinagoga Maïmònides. Según informa la Comunidad Israelita de Barcelona (CIB) en un comunicado, "tres personas han hecho pintadas con un lema que tradicionalmente ha utilizado el radicalismo árabe para exigir que el pueblo judío que vive en Israel sea arrojado al mar y relacionan estos hechos con la ruptura del Ayuntamiento con el país de Oriente Medio.

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