Trias no abandona el Ayuntamiento de Barcelona: "Me iré cuando la situación se calme"

Parecía que el adiós de Xavier Trias estaba a la vuelta de la esquina, pero tras una entrevista este miércoles en RNE, el líder de JxCat ha anunciado que "se queda por un tiempo más". Lo hace para consolidar la estructura del grupo municipal, según ha destacado. Aunque ha reconocido que su intención era la de abandonar el Ayuntamiento de Barcelona en octubre, prefiere esperar a que "la situación política esté más calmada". 

PROMESAS SIN CUMPLIR

Este jueves 7 de septiembre, Trias se estrenará con su primera rueda de prensa como cabeza de la oposición en el consistorio. Una realidad que choca con sus promesas preelectorales, donde anunció que si no era elegido como alcalde de Barcelona, no se mantendría en la oposición. Ahora parece ser que alarga esta decisión hasta el año que viene, "cuando todo esté más tranquilo", lo que implica, en realidad, dejar controlado el grupo municipal y la política de pactos con el alcalde Jaume Collboni.

Sobre la posibilidad de entrar en el gobierno de Jaume Collboni, Trias deja la puerta abierta: "Nunca descarto nada". Aunque cree que no tendría mucho sentido. El líder de JxCat ha criticado el fichaje por parte del actual alcalde de Santi Vila para presidir el Comité Asesor de Infraestructuras. Ha lamentado que, en ese caso, no le pidiera su opinión sobre ello.

PRESUPUESTOS DEL AYUNTAMIENTO

La negociación de los presupuestos del Ayuntamiento de Barcelona ha sido otro de los temas de debate. Trias considera que, primero, se debe explicar a la ciudadanía la situación económica de la ciudad y en segundo lugar, "actuar según lo que se tiene". Para ello, ha puesto de ejemplo a Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), que asegura vive una situación financiera "catastrófica".

Jaume Collboni y Xavier Trias, en Barcelona / TWITTER JAUME COLLBONI

RELACIÓN CON COLLBONI

Para acabar, ha hecho especial hincapié en la buena relación que mantiene con el actual alcalde, Collboni. Trias ha explicado que, a pesar de la "mala jugada que le hizo", se llevan bien. El líder catalán no ha pasado por alto su mala relación, en cambio, con la anterior alcaldesa Ada Colau, de la que dice no entender "su antipatía hacia él".