
Gabriel Jené y Albert Batlle, con la periodista Glòria Marin, en el diálogo en Foment
Batlle deja frío al sector comercial sobre la mejora de la seguridad en Barcelona
Gabriel Jené, presidente de Barcelona Oberta, señala que falta “más presencia policial” y “mejor comunicación” para no dejar aislada Ciutat Vella con tantas obras en marcha
Barcelona saca pecho de la reducción de delitos en 2024: "Ninguno, pequeño o grande, quedará impune"
Hay mejoras en la seguridad en Barcelona. Más detenciones, menos delitos, que se redujeron en un 4,7% en 2024. Sí, pero “falta mucho más, son descensos pequeños”. Es la voz de Gabriel Jené, presidente de Barcelona Oberta, la entidad que agrupa a los principales ejes comerciales y turísticos de la ciudad. Y su interlocutor es el concejal de Seguridad y tercer teniente de alcalde, Albert Batlle. El duelo, con buenas formas, de guante blanco, ha mostrado, sin embargo, las diferencias existentes en un acto organizado por la Societat Barcelonesa d’Estudis Econòmics i Socials de Foment del Treball.
En Barcelona se acumulan las obras en diferentes puntos de la ciudad. Hasta 200 proyectos siguen en marcha, lo que complica las cosas para el sector del comercio, además de ser un problema para la movilidad general de los ciudadanos. Batlle ha señalado que esa es una realidad, que obedece a una transformación urbanística importante, pero ha insistido en el cambio que se ha producido respecto a la seguridad.
“Hay operativos conjuntos, más presencia policial, y un trabajo en varias direcciones para que la Administración de Justicia se implique, con más recursos, en esa reducción de delitos”, ha señalado Batlle, con la idea de “acabar con esa realidad en la que los delincuentes saben que sus actos van a tener pocas consecuencias, con una mofa, incluso, hacia los efectivos policiales”.

Gabriel Jané, Albert Batlle y Glòria Marin, en Foment
El concejal de Seguridad ha insistido en que la batalla contra la multirreincidencia es ahora compartida por distintas administraciones y por los cuerpos de seguridad. “Se está en la buena dirección”, ha asegurado en distintas ocasiones.
Pero el sector comercial no lo ve igual. Gabriel Jené ha reclamado que esa presencia policial en las calles sea una constante, que sea percibida por la ciudadanía, y que se cuente con el comercio como un elemento central para mejorar la situación. A su juicio, el problema se centra en gran medida en Ciutat Vella, “donde hay una falta de comunicación entre la ciudad y esa parte de la ciudad, con obras en Via Laietana. Lo que ha sucedido es que buena parte de Barcelona no baja hacia esa zona, y ésta se ha quedado aislada, porque el monocultivo turístico crea más inseguridad”.
Iluminar mejor
Hay un debate que está muy condicionado por las “percepciones”. Ni Batlle ni Jené niegan esa consideración. Pero para superar esa situación se debe intervenir en distintas direcciones. Una es la posibilidad de iluminar más y mejor grandes zonas de la ciudad. Lo ha pedido Gabriel Jené. Batlle entiende que se ha mejorado, “teniendo en cuenta de dónde venimos”, en referencia a la etapa de Ada Colau como alcaldesa.
Ligada a esa cuestión, y tras ser preguntado Batlle por el trabajo de la alcaldesa de noche, Carmen Zapata, al señalar que está “trabajando mucho”, Gabriel Jené ha dejado caer: “No estamos de fiesta”.

Gabriel Jené, Mar Alarcón, Albert Batlle, Gloria Marin y Felipe Campos, en Foment
¿Cómo? El representante del sector comercial considera que la noche en Barcelona “es triste”, que no tiene la animación ni la concurrencia de otras ciudades, como Madrid, y que el Ayuntamiento debería preocuparse por ello. Se trata de un sector económico importante. Batlle ha recogido el guante, pero para señalar que “también hay que defender el descanso de los vecinos”.
El debate, impulsado por la SBEES, en un acto presentado por Felipe Campos, consejero delegado de Agbar, ha aflorado las diferencias existentes. Si el Ayuntamiento considera que va “por buen camino”, lo que le pide el sector comercial es que acelere, que profundice en un cambio de modelo en favor de la seguridad, de la iluminación, del dinamismo económico y que acabe lo más pronto posible con las obras.
Porque las dificultades de esas obras las comprobaron los asistentes justo al acabar el diálogo entre Jené y Batlle, conducido por la periodista Glòria Marín. Y es que el edificio de Foment se encuentra en plena Via Laietana, abierta por completo por las obras, con dificultades para los peatones y los vehículos que intentan recorrer la vía en dirección al Puerto.