
Viviendas en construcción
La crisis de vivienda desbanca a la seguridad como la mayor preocupación de los vecinos de Barcelona
El acceso a la vivienda encabeza por primera vez el ranking en una ciudad tensionada por los precios del alquiler y la escasez de oferta asequible
La vivienda se convierte, por primera vez, en la cuestión que más preocupa a los barceloneses, por delante de la seguridad ciudadana.
Así lo refleja la primera oleada del Barómetro Municipal de 2025, publicado este lunes, 30 de junio, que sitúa el acceso a la vivienda como el principal problema de la ciudad para el 29,9% de los encuestados, superando a la inseguridad, que desciende al 23,1%, tras haber liderado históricamente el ranking de inquietudes vecinales.
"No nos sorprende a nadie. Es un problema importante para todas las grandes ciudades", ha asegurado la primera teniente de alcalde de Barcelona, Laia Bonet, sobre el liderazgo de la vivienda.
Bonet ha destacado los trabajos del ejecutivo liderado por Collboni para reducir la percepción de inseguridad entre los encuestados ha favorecido el descenso. "Estamos haciendo un trabajo que tiene resultados en cuanto a seguridad y la bajada de delitos. Se ha hecho un esfuerzo por incrementar los juzgados contra multirreincidencia", ha asegurado la edil. "Es una suma de elementos durante mucho tiempo", ha remarcado.

Cartel de una vivienda en alquiler
El dato supone un punto de inflexión en la percepción ciudadana. La preocupación por la vivienda no deja de crecer desde hace meses, impulsada por el encarecimiento del mercado del alquiler, la falta de vivienda pública y la dificultad para acceder a una vivienda digna, especialmente entre jóvenes y familias con ingresos bajos.
Cambio de tendencia
En el anterior Barómetro Municipal, publicado en diciembre de 2024, la vivienda ya se perfilaba como uno de los grandes retos de la ciudad. Aunque entonces aún ocupaba el segundo lugar en el ranking de preocupaciones, con un 28,8% de menciones, su crecimiento fue notable: subió 12,2 puntos respecto a junio de ese mismo año, recortando de forma significativa la distancia con la inseguridad, que lideraba la lista con un 28,9%.
Esa edición ya evidenciaba un cambio de tendencia claro, con una ciudadanía cada vez más inquieta por el acceso a un hogar digno en una ciudad donde el mercado inmobiliario se volvía cada vez más inaccesible.
En solo seis meses, el problema ha ganado más de un punto porcentual, confirmando una tendencia ascendente que, ahora, se consolida con cifras récord.

Montaje de la compra de una vivienda en una imagen de archivo
Barcelona, una ciudad tensionada
La capital catalana vive una crisis habitacional sin precedentes. El alza constante de los precios, los procesos de gentrificación y la escasez de oferta asequible han disparado la preocupación de los ciudadanos.
La percepción de que la ciudad se está volviendo inaccesible para sus propios residentes ha calado hondo. Ocho de cada diez personas reconocen además la gravedad del problema del incivismo, que, junto con la presión del turismo y los desahucios, agrava la situación.
Todo ello llega tras la ruptura de las negociaciones entre Junts y el PSC para reformar la norma del 30% de vivienda protegida.

Un agente de la Guàrdia Urbana de Barcelona
Inseguridad a la baja, turismo en ascenso
El Barómetro también refleja un descenso significativo de la preocupación por la seguridad, que baja 5,8 puntos respecto al anterior estudio. Se trata de una caída que no se observaba desde 2018, y que coloca este asunto en segundo lugar, por detrás de la vivienda.
El turismo, por su parte, escala hasta la tercera posición (9,8%) y recupera terreno tras el tradicional descenso estacional de invierno. Pese a destacar en repetidas ocasiones que se trata de unos datos con una gran estacionalidad, Bonet ha remarcado que se trata de "un problema prioritario para este gobierno".
El cuarto tema que más preocupa a los ciudadanos de Barcelona son los problemas con la inmigración, con un 5,7%.
Le sigue la limpieza, con apenas un 5,1% de menciones, manteniendo la tónica de mejora percibida en los últimos meses.

Operarios de limpieza en Barcelona
Mejor percepción de la ciudad y de la gestión municipal
Pese a las preocupaciones persistentes, la ciudadanía muestra un mayor optimismo sobre la situación general de Barcelona.
También mejora la valoración de la gestión del Ayuntamiento: el 49,2% de los encuestados la consideran buena o muy buena, el porcentaje más alto desde 2018. Las opiniones negativas descienden casi cinco puntos y se sitúan en el 32,1%.
Los datos muestran un incremento del 7% sobre las voces que valoran positivamente la gestión municipal si se tiene en cuenta los datos del anterior barómetro.

La primera teniente de alcalde de Barcelona, Laia Bonet
Bonet ha sacado pecho de los datos del Barómetro municipal que, según ha afirmado, muestran que "Barcelona mejora". "Lo dice la ciudadanía", ha añadido.
La primera teniente ha asegurado que "estamos contentos de que la ciudadanía valore cada vez más positivamente el trabajo del gobierno municipal. Dos años después ha crecido siete puntos. Esperamos que sea una tendencia que se consolide".
La edil ha afirmado que los datos son "un impulso para seguir trabajando con la misma manera". "La política de soluciones está dando resultados. Política útil y rigurosa para resolver los problemas reales de la ciudadanía. En Barcelona existe un gobierno que gobierna", ha sentenciado Bonet.