Después de casi dos años y medio de exilio, el FC Barcelona ha vuelto a casa. El nuevo Spotify Camp Nou, remodelado y modernizado, ha abierto sus puertas este viernes, 7 de noviembre, para acoger un entrenamiento a puerta abierta ante más de 21.000 aficionados, en lo que se ha convertido en una auténtica fiesta de regreso.
Era la primera vez desde mayo de 2023 que los culés volvían a pisar el estadio de Les Corts, y la jornada ha transcurrido con una mezcla de nostalgia, orgullo y alivio: no ha habido colapsos en los accesos ni incidentes relevantes, pese a la expectación generada y las dudas que acompañaban la reapertura.
El Camp Nou reformado
Ensayo
El entrenamiento, concebido como una prueba para comprobar el funcionamiento del nuevo recinto antes de la reapertura oficial, ha servido también para medir la respuesta de la afición. Y esta ha sido contundente: colas ordenadas, transporte público fluido y una afluencia de público que ha desbordado ilusión.
“Ha ido todo perfecto, la verdad. Teníamos miedo de que fuera un caos con tanta gente, pero hemos entrado sin problemas. Ha sido muy emocionante volver a ver el Camp Nou lleno de vida”, explicaba Sílvia Roca, socia desde hace 18 años.
"Todo ha estado muy bien. Es el mejor estadio del mundo. Todo ha sido muy ordenado y no ha habido caos", explica Zofia, una polaca que vive en Barcelona. "Volvemos a casa", asegura Oriol, otro de los socios que se ha acercado hasta el estadio esta mañana.
Apenas se han registrado retenciones en las vías principales. Los accesos peatonales han demostrado su eficacia. Una escena muy distinta a la que muchos temían después de meses de polémicas por las licencias y los retrasos en la ejecución de la reforma del campo del club azulgrana.
El Camp Nou en una imagen de archivo
“El resultado es espectacular. Se nota que el club ha querido hacer las cosas bien”, explica Xavier Lladó, un aficionado que ha venido desde Vic con su hijo de ocho años para no perderse la cita. "Volvemos a casa", ha asegurado otro de los asistentes.
El club, por su parte, se ha mostrado satisfecho con el ensayo. El presidente Joan Laporta y el técnico Hansi Flick han saludado a los aficionados al final de la sesión, conscientes de que este era un momento simbólico para el barcelonismo.
El Camp Nou durante el entreno
Reclamaciones vecinales
Pese a la buena organización durante el regreso al Camp Nou, el debate vecinal sigue lejos de cerrarse. Los residentes del entorno del estadio, especialmente en el barrio de Sant Ramon – La Maternitat, han mostrado su rechazo al nuevo plan de movilidad municipal previsto para los días de partido.
La Asociación de Vecinos de Sant Ramon denuncia que las restricciones planteadas por el Ayuntamiento de Barcelona limitarán la libre circulación dentro del propio barrio y obligarán a los residentes a realizar largos rodeos para poder acceder a sus viviendas.
Los vecinos temen que el flujo de hasta 90.000 personas y más de 3.000 plazas de aparcamiento previstas en el nuevo estadio colapsen las calles interiores del barrio, sobre todo en los accesos por Avenida de Xile y Cardenal Reig, que el consistorio prevé restringir. A ello se suma el malestar por la circulación de autobuses turísticos y lanzaderas que, según el plan actual, deberán atravesar Sant Ramon vacíos hasta llegar a sus puntos de estacionamiento.
Las gradas del Camp Nou en su estreno
La emoción de volver a casa
El ambiente en las gradas ha sido el de un reencuentro entre viejos amigos. Durante casi dos horas, los seguidores no han dejado de aplaudir a los jugadores. La ovación más sonora se la ha llevado Lamine Yamal, convertido ya en símbolo de la nueva generación culé. A su lado, veteranos como De Jong han saludado al público.
“Es impresionante. Lo ves por fuera y ya impresiona, pero cuando entras... te das cuenta de que sigue siendo el mismo Camp Nou, solo que más moderno, más cómodo, más nuestro”, asegura Carles Amat, un socio octogenario que no pisaba el estadio desde antes de la pandemia. Eso sí, el las memorias del Camp Nou no se dejan atrás: "Tenemos muchos recuerdos".
"Respetar la esencia"
El nuevo Camp Nou combina la modernización tecnológica —con accesos digitales, nueva iluminación LED y un sistema de sonido envolvente— con la preservación de la identidad histórica. El club ha insistido en mantener el alma del estadio, algo que, a juzgar por las reacciones, ha conseguido.
“Han respetado la esencia. Es distinto, sí, pero cuando miras el césped sientes lo mismo de siempre”, ha resumido Laura Font, una joven aficionada de Sant Cugat que ha asistiso con su grupo de amigos.
“Volver aquí es volver a nuestra infancia, a los domingos con mi padre en la grada. Hoy siento que hemos recuperado algo más que un estadio: hemos recuperado el alma del Barça”, ha añadido Jordi Cabot, otro de los asistentes, resumiendo el sentimiento general.
