El uso de la bicicleta se ha disparado en el Baix Llobregat. Y una de las principales razones de este crecimiento es el nuevo carril bici que une la Diagonal con Esplugues del Llobregat. Desde que fue inaugurado, el pasado 19 de marzo, el número de usuarios que decide desplazarse entre el Baix Llobregat y Barcelona en bicicleta no para de crear. En 42 días, hasta el domingo 29 de abril, han pasado por esta nueva vía 28.834 vehículos de dos ruedas. La cifra exacta se conoce porque el Área Metropolitana de Barcelona ha colocado un contador en una de las entradas, la del parque de Cervantes, en la Diagonal.
La vía ciclista tiene 880 metros y ha costado 1,7 millones de euros. Es el primer carril bici metropolitano que conecta la capital catalana hasta el Baix Llobregat, hasta ahora una frontera inaccesible para muchos ciclistas. Desde el parque de Cervantes, en dirección a Esplugues, el carril circula junto a la salida de Barcelona por la Diagonal, pasa por debajo de la Ronda de Dalt y por encima del ramal entre la B-23 y la misma ronda, y antes de llegar a Esplugues toma un par de pasos inferiores debajo de los enlaces de la B-23 y la Ronda de Dalt.
Diariamente, decenas de personas usan este carril bici para desplazarse desde Esplugues --y otras ciudades metropolitanas-- hasta Barcelona para ir a sus puestos de trabajo o a la universidad. La cifra media de bicicletas que circulan por la vía se sitúa en 686 al día. Pero, aunque pueda parecer extraño, las jornadas de mayor afluencia no son las laborables. Hasta ahora, los índices más altos se han registrado en festivos, por ejemplo el lunes de Pascua, con 1.224 vehículos, y el domingo 15 de abril, con 1.599, según Sílvia Casorrán, técnica de movilidad sostenible del Área Metropolitana. El 15 de abril era el Día de la Bicicleta y Barcelona albergó también una manifestación a favor de los políticos presos.
VÍA MIXTA
La nueva infraestructura es una vía mixta para ciclistas y peatones. Tiene unos 4,5 metros de ancho, 2,5 para los ciclistas y dos para los peatones. El carril bici es de doble sentido de circulación y se sitúa en el lado de la autopista, mientras que la plataforma para peatones se ubica en la zona de montaña. Ambos espacios son de pavimento, pero están claramente diferenciados y señalizados para evitar conflictos. Para que la circulación nocturna sea totalmente segura, el carril se ha iluminado a conciencia, principalmente con proyectores de led.
A lo largo de año tendría que estar terminado el carril bici que unirá Sant Just Desvern con Esplugues. De esta manera, los ciclistas podrán desplazarse de "forma segura" desde el Baix Llobregat hasta el Fòrum a través de los distintos carriles existentes en la capital catalana. En el otro extremo de la ciudad, un carril une el municipio de Sant Adrià del Besòs con el campus de la Universidad Pompeu Fabra de la Ciutadella. En un futuro, esta vía, llegará hasta Montgat y Blanes.