Los tribunales de justicia acaban de suprimir la existencia de 16 plazas de liberados sindicales dentro de la empresa pública municipal Transportes Municipales de Barcelona (TMB). Tras años pleiteando, el sindicato CGT ganó el pulso a la empresa y a los demás sindicatos al lograr que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) le diese la razón en un pleito que ha durado más de tres años.
Según la CGT, la sentencia equivale a declarar ilegales 132.544 horas correspondientes a los 16 liberados que ahora han anulado los tribunales (unas 33.136 horas anuales). Traducido en dinero, ello equivaldría a 4.089.000 euros. Un comunicado de CGT señala que los 16 trabajadores liberados “no trabajan ningún día del año y ahora deberán volver a trabajar”. Y subraya que “el resumen es que UGT y CCOO dejan de tener cada una 6 liberados que habrá de volver a su puesto de trabajo. También pierden la bolsa de 300 horas mensuales que tenían pactada con la dirección. El SIT pierde cuatro liberados y 300 horas mensuales y ACTUB y la CGT dejan de tener, de lunes a viernes, uno rebajado en la comisión permanente”.
El comité de empresa de TMB está compuesto por seis representantes de UGT y otros seis del SIT; cinco de CCOO; 4 de CGT; 3 de ACTUB; dos de USOC y de la COS; y uno de ACAT.
UN ARTÍCULO “OLVIDADO”
Saturnino Mercader, portavoz de CGT en TMB, señala a Metrópoli Abierta que todo partió del real decreto 20/2012 de medidas para ahorro en la Administración. Es decir, del decreto que establecía los recortes en administraciones y empresas públicas (y que eliminó la paga extraordinaria de los funcionarios, entre otras medidas).
“Ese artículo se aplicó en su totalidad a las plantillas de la Administración y de las empresas. Pero hubo una excepción: en TMB, no se aplicó el artículo 10 de ese real decreto, que trata de la reducción de créditos y permisos sindicales. En él, se dice que no se pueden conceder más horas de rebaje sindical que lo que prevé el Estatuto de los Trabajadores”, explica el líder de la CGT.
Mercader subraya que había una serie de empleados que no trabajaba nunca. “Se beneficiaban de acuerdos que estaban por encima del Estatuto de los Trabajadores. Lo curioso del caso es que la empresa decidiera aplicar todo el real decreto y acometer los recortes de salarios, pero que no tocase ese artículo”. Para el dirigente sindical, “no sabemos a cambio de qué la dirección mantuvo esos privilegios, pero posiblemente fuese a cambio de que esos sindicatos se aviniesen a firmar los convenios a la baja”.
FIRMAS A CAMBIO DE FAVORES
Los fundamentos de derecho de la sentencia señalan que la compañía reconoció a las secciones sindicales de CCOO y UGT “créditos horarios sindicales por encima del crédito horario que corresponde a cada uno de los sindicatos existentes en la empresa”. Y que la reducción horaria establecida en el real decreto 20/2012 “deviene de obligatoria aplicación”. A partir de ahí, sostiene el fallo que el real decreto tiene una “mayor jerarquía que el convenio de empresa y los acuerdos alcanzados con las secciones sindicales de UGT y CCOO”.
Tras la decisión del TSJC, la CGT afirma que desde este sindicato “celebramos esta sentencia con entusiasmo, afirmamos que los convenios que han ido firmando UGT, CCOO y SIT siempre han sido a cambio de favores de la dirección de TMB a estos sindicatos. Desde CGT entendemos que la mejor manera de afrontar las relaciones laborales en TMB, para mejorar las condiciones laborales de la plantilla es que los sindicatos no le deban ningún favor a la dirección”.
EN 2010 YA HUBO OTRA SENTENCIA
Señalan también que “no entendemos ni compartimos que pueda haber sindicalistas de TMB que lleven más de 20 años sin trabajar”. Así, enfatizan que con la sentencia “se acaba con esta lacra sindical en TMB, lo que habría de dar lugar a volver a entender el sindicalismo como una dedicación noble y altruista que jamás se debería haber abandonado y que entiende que no debe haber diferencias entre trabajadores y sindicalistas”.
Desde la CGT subrayan también que no es la primera sentencia en este sentido, ya que en el 2010 este sindicato ya ganó otro pleito similar y obtuvo una sentencia judicial que declaraba ilegales los acuerdos de la dirección de TMB con UGT y CCOO. En aquella ocasión, fueron suprimidos tres liberados sindicales ugetistas y uno de CCOO que, para más inri, “se había acordado verbalmente, sin ningún documento”.