Transporte Metropolitanos de Barcelona (TMB) ha quitado de las calles más de 80 autobuses en una semana. Así lo asegura la Confederación General de Trabajadores. La supresión ha afectado a distintas líneas, según la CGT, con el consecuente perjuicio para los usuarios.
A modo de ejemplo, el sindicato afirma que solo desde la cochera de Horta dejaron de salir entre los días 27 de enero y 1 de febrero 66 buses. Entre las líneas afectadas figuran la 24, 202, 204, 217, 219, 47, 19, 221, 223 y 229.
SIN CONTRATO COMPLETO
CGT dice que la dirección de la empresa pública alega que la disminución de servicio es por la falta de personal. Sin embargo, el sindicato considera que esta situación se podría revertir contratando a tiempo completo a conductores que solo trabajan los fines de semana, a lo que TMB se niega, apuntan los representantes de CGT Saturnino Mercader, Joaquín Godoy y Juan Ramiro.
Desde CGT también se llama a hacer cumplir una sentencia del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya por la cual se tendrían "que suprimir 33.116 horas ilegales de rebaje sindical que la empresa tiene pactadas con UGT y CCOO", subrayan desde CGT. Con esta eliminación habría unos 20 trabajadores más trabajando.
CAOS ORGANIZATIVO
Según el sindicato, TMB se encuentra sumida desde hace años "en el caos organizativo" y culpa a los actuales máximos responsables de la empresa, la presidenta Rosa Alarcón (PSC) y el consejero delegado, Gonzalo Lertxundi, de la disminución de buses. En opinión de CGT, con su actitud están retrasando el cambio de rumbo que debe tomar TMB para volver a dar un servicio de calidad a los barceloneses.
El problema ha coincidido con la entrada en vigor de la Zona de Bajas Emisiones. CGT considera que la empresa tampoco ha tenido en cuenta un previsible aumento del número de pasajeros en la flota de bus, gente que antes se movía en coche privado y ahora se ha pasado al transporte público.