El tráfico en los principales accesos al Área Metropolitana de Barcelona (AMB) ha descendido hoy más de un 43% en comparación con el lunes de la semana pasada, en la primera jornada laborable desde que han entrado en vigor las restricciones de circulación con motivo del estado de alarma para evitar la propagación del coronavirus.
Según ha informado el Servei Català de Trànsit (SCT), hasta las 18.00 horas el tráfico se ha reducido en un 43,2% en la salida del área metropolitana de Barcelona y en un 46,5% en la entrada respecto al lunes de la semana pasada.
CAÍDAS EN OTRAS VÍAS
En el conjunto de Cataluña, la movilidad también ha caído considerablemente debido a las restricciones de circulación, según datos de Tráfico, en este caso hasta las 12.00 horas. En concreto, en el Túnel del Cadí, en la C-16, la circulación ha descendido un 68% en dirección a Barcelona y un 71% en dirección a Puigcerdá.
También los peajes han notado una reducción de la movilidad: en la AP-7, se ha reducido en Martorell un 45% el tráfico hacia Tarragona y un 39% hacia Barcelona; en la Roca del Vallès un 35% hacia Francia y un 44% hacia Barcelona; en Vila-seca un 54% hacia Valencia y un 33% hacia Barcelona, y en La Jonquera un 11% hacia Francia y un 37% hacia Barcelona.
En la C-32, el peaje de Vallcarca, en Sitges, ha sufrido una caída de cerca del 50% del tráfico respecto al pasado lunes, tanto en dirección a Tarragona como en Barcelona, mientras que en el peaje de Vilassar, también en la C-32, un 48% hacia Girona y un 52% hacia Barcelona.
Por su parte, en el peaje de Mollet del Vallès, en la C-33, la reducción ha sido de un 48 % hacia Girona y un 53 % hacia Barcelona.
SERVICIOS OPERATIVOS
En rueda de prensa el conseller de Interior de la Generalitat, Miquel Buch, ha explicado que se han realizado mensajes comunicativos en los paneles del Servei Català de Trànsit (SCT), y ha advertido de que el 50% de las llamadas al 112 son por consultas por el coronavirus, al que ha pedido que solo se utilice para emergencias.
La consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha destacado que los servicios de seguridad, emergencias, protección civil y sanitarios están "plenamente operativos", mientras que el personal docente no trabaja, y el 55% de los funcionarios, administrativos y técnicos laborales están trabajando para garantizar los servicios básicos y estratégicos --entre el 65% y el 75% de éstos lo hacen mediante teletrabajo--.
TRANSPORTE PÚBLICO
Budó ha destacado que la oferta del transporte público de este lunes ha sido la habitual para evaluar la demanda de los usuarios con las restricciones: hasta las 10.00 horas, la disminución de usuarios se ha situado entre el 75% y el 90%, con excepciones en algunas líneas y estaciones, que han registrado un pasaje superior, también a causa de los cambios de hábitos de los usuarios, algunos de los cuales se han desplazado antes de la hora punta.
Ha garantizado que el transporte público se adecuará a la demanda --reduciéndola entre un 40% y un 60%--, aunque se reforzará en puntos y franjas horarias determinados con más demanda, que ha pedido reducir limitando los desplazamientos a los indispensables y para los trabajadores de servicios básicos y estratégicos.
La consellera ha avanzado que entre este martes y el jueves se aplicarán progresivamente cambios en el transporte público, y ha avanzado que los servicios nocturnos del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y de la dirección de transporte público bajarán al 40%, y que se anulará la línea de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) de Sarrià-Reina Elisenda.
Preguntada por si se debería cerrar el transporte público, ha resaltado que los ciudadanos que deben prestar servicios esenciales deben poderse desplazar, y ha señalado que las medidas pasarán por reducir el servicio de forma efectiva pero que por ahora están trabajando con los operadores las cifras concretas.