Pivotes en las plazas de aparcamiento destinadas para personas minusválidas. La política de urbanismo de Ada Colau no cesa y sigue llenando Barcelona de elementos de movilidad táctica como los pivotes, los cojines berlineses o los polémicos bloques de hormigón.
La última aplicación ha enfadado a los usuarios de las plazas para discapacitados. El internauta Jordi Rodri ha denunciado a través de Twitter que los denominados pivotes amarillos no permiten que los pasajeros de los vehículos salgan con facilidad. Ha acompañado la denuncia con una fotografía explícita recogida por Metrópoli Abierta.
ENFADO GENERALIZADO
"Hola, ¿ahora en las plazas para discapacitados ponéis palos para que no se puedan abrir las puertas? No dais más de sí, ¿verdad?", lamenta el usuario que menciona a la alcaldesa de la ciudad, Ada Colau, y a la teniente de Urbanismo y Movilidad, Janet Sanz, en la denuncia.
Este reclamo se suma al alud de críticas que reciben a diario los elementos de movilidad táctica del consistorio barcelonés. Hace unos días los internautas exponían en las redes su enfado por las maxiaceras o por la cantidad de pivotes que impiden salir a los conductores cuando estacionan sus coches o se cargan plazas reservadas para minusválidos.