Los coches que están dados de baja temporal en la Dirección General de Tráfico (DGT) también deben pagar el nuevo impuesto sobre las emisiones de dióxido de carbono (CO2). El tributo es de la Generalitat y se empezará a cobrar el próximo septiembre. Por ahora, solo se pagará en Cataluña. FECAVEM, la patronal de la automoción de Cataluña, ha reclamado la suspensión del impuesto hasta que acabe la crisis sanitaria. En 2020, el Govern dejó sin efecto el cobro correspondiente a 2019 por la pandemia. Sin embargo, este año los catalanes tendrán que hacer frente a una nueva carga fiscal a pesar de la importante recesión.
Según informa el Govern en su página web, el objeto del impuesto es gravar las emisiones de CO2 que producen los vehículos y que inciden en el incremento de las emisiones de gases con efecto invernadero. Sin embargo, los vehículos zombies también lo deberán pagar. "Los vehículos zombies son aquellos a los que se ha perdido la pista, que están de baja temporal", subraya el secretario general del Gremio del Motor de Barcelona, Joan Blancafort. El directivo añade que se están dando casos de coches que si tienen unas condiciones mínimas circulan sin seguro y "la DGT quiere acabar con ello". La baja temporal es para un año y si no se pide una prórroga (dos meses antes de la finalización), el vehículo pasa automáticamente a darse de alta.
PAGAR SIN CIRCULAR
Pau, un vecino de Barcelona, es uno de los ciudadanos que tendrá que pagar el impuesto por emisiones de CO2 correspondiente al 2020 de un coche que el año pasado no circuló. El turismo (el que aparece en la imagen principal de esta información) fue dado de baja en diciembre de 2019 por accidente. "No circuló en todo el año pasado. Lo di de baja para no pagar impuestos. Es una estafa, afán recaudatorio. No ha emitido nada de CO2", cuenta. El impuesto grava 2020, un año en el que la circulación estuvo restringida diversos meses por la pandemia.
El titular se ha dirigido a la Generalitat para protestar, pero la administración catalana no ha aceptado las alegaciones. La respuesta autonómica dice que la baja temporal en la DGT no exime del pago. El único motivo acreditado es si la baja es por robo y únicamente por los días en los que el vehículo ha estado fuera de circulación por este motivo. "Sé de mecánica y mi intención era arreglar el vehículo, pero lo acabaré llevando al desguace para no tener que pagar más", añade Pau.
Para el secretario general del Gremio del Motor, en septiembre, cuando se empiecen a enviar los recibos llegarán las sorpresas. "Mucha gente que tiene dado el coche de baja temporal se cree que está exenta del impuesto, pero no es así", dice Blancafort. Para Pau, el vecino afectado, el cobro es "abusivo". En su caso, la cantidad a pagar será de 18,51 euros por emitir 151 g/km de CO2 y 366 días tributados, figura en el documento de la Generalitat al que ha tenido acceso Metrópoli.
Coches en circulación emitiendo gases contaminantes / ARCHIVO
GRAVA LA PROPIEDAD
Blancafort explica que este impuesto "grava la tenencia -propiedad- de un vehículo y no el uso". Si en el tributo municipal de vehículos de tracción mecánica se pagan "caballos fiscales", la nueva tasa autonómica fiscaliza las emisiones de CO2 del coche, moto o furgoneta. Blancafort asegura que el titular de un vehículo desembolsará lo mismo haga 10.000 o 150.000 kilómetros en un año.
El pistoletazo de salida al nuevo impuesto se ha dado el 1 de mayo. Ese día se publicó el padrón provisional de vehículos, que según Blancafort ronda los seis millones en Cataluña. "El 4 de junio acababa la fecha límite para presentar alegaciones", indica Blancafort. Posteriormente, el 1 de septiembre se publicará el padrón definitivo y el día 15 de septiembre se iniciará el periodo de cobro. El calendario se puede consultar en la página web de la Generalitat [ver aquí]. Si el ciudadano no ha hecho el pago por su cuenta a través de la sede electrónica de la Agencia Tributària de Catalunya, a partir de octubre recibirá una notificación en el domicilio.
CANTIDADES A DESEMBOLSAR
La Generalitat informa en la web de la Agència Tributària de Catalunya que los precios del año 2020 -que se pagarán este 2021- serán bonificados. Así, no tributarán los turismos y las motos con emisiones de CO2 hasta 120 g/km ni las furgonetas con emisiones hasta 160 g/km. En el resto de motos y coches, el importe oscilará entre 0,55 y 0,80 euros para vehículos que emitan entre 120 y 200 g/km de CO2, y 1,10 euros para los que emitan más de 200 g/km de dióxido de carbono. Las furgonetas de hasta 3,5 toneladas que emitan más de 160 g/km de CO2 pagarán 0,30 euros.
A partir del ejercicio 2021 -que se desembolsará en 2022-, el impuesto se incrementará de forma notable. En algunos casos, incluso, se doblará o más, pasando de 40 a 83,5 para vehículos que emitan 180 g/km de CO2, según FECAVEM. Tendrán coste 0 los coches y motos que emitan hasta 95 g/km de CO2. El resto tendrá que pagar entre 0,70 euros -para los vehículos que emitan entre 95 y 120 g/km de CO2- y 1,40 euros para aquellos turismos y motocicletas que emitan más de 200 g/km de CO2. Las furgonetas no pagarán hasta los 140 g/km de CO2. Las que emitan una cantidad superior de CO2 desembolsarán 0,70 euros g/km.
A nivel general, y entre otros supuestos, otros vehículos que no tributan son los 100 por 100 eléctricos, los ciclomotores, los camiones de más de 3,5 toneladas, los autocares, los vehículos oficiales, las ambulancias, los vehículos adaptados para las personas de movilidad reducida y los vehículos clásicos o con matrículas históricas.