Aplicación pública del taxi: la eterna promesa que nunca llega a Barcelona

Entre las asignaturas pendientes que tiene el Institut Metropolità del Taxi (IMET) con los conductores barceloneses, se encuentra la prometida aplicación pública del taxi, una herramienta fundamental en la digitalización del sector para mejorar la calidad de un servicio que continúa sufriendo los efectos de la pandemia de coronavirus.

En primera instancia, este aplicativo se planteó como un proyecto a desarrollar durante tres años, y en hasta cinco fases distintas. Pese a ello, y debido a la necesidad de que la app estuviera disponible lo antes posible, la administración apuntó a inicios de 2021 como fecha de estreno.

Estando ya en la segunda mitad del año, y tras un evidente incumplimiento de los tiempos que ha hecho protestar en diversas ocasiones a los taxistas, los chóferes insisten en que la puesta en marcha de la iniciativa va tarde, así como que necesitaría algunas mejoras para que contara con una mayor competitividad.

MOBILE WORLD CONGRESS

El coordinador de Élite Taxi, Tito Álvarez, explica que la concejal Rosa Alarcón indicó que su intención es que la aplicación estuviera disponible "para el Mobile World Congress del año que viene", una fecha que no es totalmente fija.

Álvarez asegura que el colectivo está intentando que la futura aplicación pública del sector disponga de más funcionalidades, como son "el precio cerrado y la pasarela de pago".

Huelga de taxis en Barcelona / EFE

Pese a ello, cree que será "difícil" lograr que se incluyan estas peticiones, ya que "la licitación" para su desarrollo "está hecha".

RETRASO

Jaime Sau, Secretario de la Unión de Barcelona del STAC, afirma que la app prevista para el MWC de 2022 "se va a intentar pagar con fondos europeos", y pide que se cumpla con dicha fecha: "Nos gustaría que estuviera en el Mobile, porque sería la digitalización del taxi, un buen escaparate para los ciudadanos".

En este sentido, destaca que desde el punto de vista del sindicato la creación de este sistema "va con retraso", y recuerda que a los conductores ya se les ha dado "diversos plazos" para que el proyecto esté finalizado y operativo.

Respecto a su funcionamiento, subraya que se trata de un sistema de "mano alzada virtual", un paso importante para la mejora del servicio del taxi en Barcelona.

COMPETENCIA PRIVADA

La ausencia de una aplicación pública del taxi a día de hoy, provoca a los conductores de este servicio público que esperan la app una desventaja competitiva ante otros operadores que aseguraron su digitalización años atrás.

El proveedor Free Now, anteriormente conocido como mytaxi, es el claro ejemplo de iniciativa privada en el ámbito de la movilidad que trabaja con taxistas en la capital catalana y en otro centenar de ciudades europeas.

Su aplicación, disponible para dispositivos Android y iOS, permite realizar reservas, seguir el trayecto del conductor e incluye una gran ausencia en la aplicación pública barcelonesa que está por llegar deseada por muchos chóferes: una pasarela de pago.

UBER Y CABIFY

Las compañías con las que el taxi barcelonés está en guerra, Uber y Cabify, también disponen de una digitalización que ha dejado atrás al modelo público, ya que la administración no ha actuado con la celeridad necesaria en el desarrollo del aplicativo.

Tal y como pasa con Free Now, los usuarios pueden disponer de todo tipo de información sobre sus trayectos y hacer determinadas peticiones, así como pagos desde su teléfono. La incorporación de un sistema completo como lo son éstos supondría un gran atractivo para los viajeros, y facilitaría que la totalidad del taxi barcelonés paliara el duro golpe de la crisis derivada de la pandemia.