La estafa del nuevo impuesto de CO2: Los conductores pagarán hasta un 1.000% más en 2022

El final de la temporada estival será más caro que nunca para los conductores de Barcelona y de toda Cataluña. A partir del próximo 15 de septiembre, se pagará por primera vez el impuesto de CO2 implantado por la Generalitat, que penaliza a los vehículos según las emisiones de dióxido de carbono que emiten.

El tributo, justificado desde la administración catalana por la situación de emergencia climática actual, se cobrará a los titulares de turismos, motocicletas y furgonetas con domicilio fiscal en Cataluña durante 2020, o que dispusieran de vehículos registrados en la comunidad el pasado año.

Los vehículos eléctricos, ciclomotores, camiones, autocares y los autorizados para transportar a nueve personas quedan exentos de este impuesto. Tampoco pagarán los vehículos clásicos ni aquellos con matrícula de vehículo histórico.

IMPUESTO EN CATALUÑA

Jaume Roura, presidente de la Federació Catalana de Venedors de Vehicles a Motor (FECAVEM), lamenta que el impuesto que tan solo se paga en Cataluña suponga "una ventaja de los no catalanes ante los catalanes", ya que en el resto de España no se cuenta con dicho gravamen.

En este sentido, insiste en que desde la patronal siempre se defenderá la "mejora del medio ambiente", y explica que debido a la pandemia se pidió sin éxito "al consejero Calvet que se aplazara la puesta en marcha del impuesto hasta 2023" para que su implantación llegara en un mejor momento económico que el actual.

Retenciones en la Ronda de Dalt / EFE

Roura recuerda que Jordi Puigneró, vicepresidente del Govern, aseguró públicamente que tras la reciente retirada de peajes no se instauraría una "medida impositiva" que diferenciase a Cataluña del resto de España, una afirmación que choca con el inicio del nuevo tributo.

PENALIZACIÓN POR VEHÍCULO

El presidente de la patronal explica que este impuesto es "totalmente injusto", ya que "no penaliza el uso, sino tener un vehículo". De esta manera, no se tiene en cuenta el kilometraje anual realizado por el conductor, apuntando tan solo al nivel de emisiones. El impuesto, incluso, afectará a los vehículos que se encuentren de baja temporalmente.

Respecto al coste del tributo, Roura apunta que la eliminación de la bonificación que la Generalitat hará este año supondrá un "gravamen impositivo notorio perjudicial" para todos aquellos que dispongan de vehículos, lo que provocará que "mucha gente matriculará coches fuera de Cataluña" para eludir el impuesto.

Por todo ello, el presidente de la patronal señala que se ha producido una "actuación precipitada e inadecuada" y reclama diálogo para buscar un momento económicamente más oportuno para poner en marcha esta medida.

PRECIO DISPARADO

Este año se abonará el coste relativo a 2020, que será bonificado, lo que dejará libre de tributo a los turismos y las motos con emisiones de CO2 hasta 120 g/km, así como a las furgonetas con emisiones hasta 160 g/km.

Vehículos en la Ronda Litoral / EUROPA PRESS

Debido a la bonificación, en el resto de coches y motocicletas el importe aproximado oscilará entre 0,55 euros para vehículos que emitan entre 120 g/km y hasta 140 g/km de CO2, y 1,10 euros para los que emitan más de 200 g/km de dióxido de carbono. Las furgonetas de hasta 3,5 toneladas que emitan más de 160 g/km de CO2 pagarán 0,30 euros.

Estos precios no tienen nada que ver con los que se pagarán el próximo año. Según FECAVEM, la eliminación del descuento provocará subidas en el coste de entre un 40% y más de un 1.000% de la cuota íntegra establecida para este año. El aumento se traducirá en impuestos que podrán superar los 300 euros en coches y motos, mientras que los propietarios de las furgonetas más contaminantes deberán afrontar pagos que rozarán los 150 euros.