Las líneas R11 y RG1 de Renfe circulan este miércoles con retrasos de 30 minutos de media por segundo día consecutivo debido a la limitación de la capacidad operativa del servicio tras el choque este lunes de un tren con un árbol caído entre Caldes y Sils (Girona), que causó daños en la vía.
Los operarios siguen trabajando para reparar la infraestructura y Adif prevé recuperar la circulación en dos vías durante la madrugada de este jueves, antes de que empiece el servicio, han informado fuentes de Renfe.
RETRASOS
La compañía ha explicado que los trenes de la R11 y la RG1 circulan con velocidad limitada en un tramo de 400 metros, y que "en la medida de lo posible" encaminará hacia el AVE a los viajeros que se dirijan a Girona o Figueras (Girona) desde Barcelona, y viceversa.
CAÍDA DE UN ÁRBOL EN LOS RAÍLES
El pasado lunes, 25 de octubre, doce personas resultaron heridas con contusiones leves al arrollar un tren un árbol que había caído sobre la zona de vías entre Sils y Caldes de Malavella. El convoy, que había salido de Portbou a las 14:35 horas con destino Barcelona, transportaba a 230 viajeros, que fueron evacuados con la ayuda de los bomberos y los Mossos d'Esquadra y trasladados a autobuses para proseguir su viaje.
El accidente tuvo lugar en torno a las 16:00 horas y obligó a cortar la circulación ferroviaria entre Sils y Caldes. El árbol afectó a la catenaria y a la parte delantera del tren, que quedó destrozada. Se llegó a producir humo, apuntaron testigos del siniestro. El tendido de alimentación eléctrica resultó seriamente dañado, lo que con toda seguridad demorará los trabajos de reparación.
Técnicos de Adif están evaluando las causas del accidente –hace pocas semanas cayó otro árbol sobre las vías en esa zona– y está previsto que lo antes posible se inicien las labores para que la línea pueda ponerse en servicio.