La operación retorno tras el puente de mayo causa atascos kilométricos en numerosas carreteras catalanas en sentido Barcelona. La AP-7 es la vía más afectada, con 13 kilómetros de retenciones entre Montornès y Llinars del Vallès.

La misma vía registra ocho kilómetros de retenciones entre Subirats y Vilafranca del Penedès, también hacia Barcelona. A la altura de Fogars de la Selva hay unos cinco kilómetros de retenciones, y otros seis se concentran entre Granollers y La Roca del Vallès en sentido sur.

OTRAS VÍAS

Entre las carreteras que presentan retenciones en la tarde de este domingo, también se encuentra la C-32 a la altura de Calella con dos kilómetros de paros, mientras que la C-33 a la altura de Montcada i Reixac registra un tráfico similar.

En la C-55 a la altura de Manresa se suman tres kilómetros de retenciones en sentido Barcelona, mientras que en la C-58 se ha abierto el carril bus VAO a todo el tráfico para lograr una mayor fluidez circulatoria.

VEHÍCULOS

Según ha informado el Servei Català de Trànsit (SCT), a las 20.00 horas ya habían vuelto unos 190.000 vehículos al área de Barcelona, el 70% del tráfico total previsto.

Noticias relacionadas