El número de empresas que podrán construir carriles bici en Barcelona serán numerus clausus. El Ayuntamiento ha firmado un acuerdo marco para delimitar qué empresas estarán habilitadas en un futuro para realizar las obras de las calzadas para bicicletas: serán sólo 23 las elegidas, después de un proceso de selección al que se presentaron un total de 82 compañías. “Se pretende subir la necesidad de agilizar la contratación y ejecución de obras de actuaciones de mejora del espacio público en el ámbito de la urbanización”, dice una memoria justificativa del proceso selectivo.

El plazo del acuerdo marco es, en principio, de un año, aunque puede tener dos prórrogas de un año cada una. El monto total del contrato es de 165.528.000 euros, aunque la firma del contrato no quiere decir que ésa sea la cifra que se vaya a invertir en este concepto durante la vigencia del acuerdo marco. Se trata del presupuesto máximo que el consistorio puede destinar a los carriles bici. De ese presupuesto es de donde se irá sacando el dinero que haga falta para el mantenimiento de la red ciclista y ciclable o para la apertura de nuevos carriles. Lo más probable, según fuentes municipales, es que la mayor parte del presupuesto no llegue a ejecutarse.

Dos lotes 

Para clarificar más la situación, el acuerdo marco se dividió en dos lotes: el primero engloba las obras con un presupuesto entre 120.000 y 499.999 euros. Se presentaron a concurso 37 empresas, de las que fueron admitidas 36, aunque las afortunadas fueron solamente 8: Arnó Infraestructuras, Voracys, Endeaboc, Construccions Àrids i Formigons, Izer Ingeniería y Economía, Vialex Constructora Aragonesa, Sociedad Ibérica de Construcciones Eléctricas (SICE) y Obres i Projectes Catalunya. Para este lote se destinarán un máximo de 20.328.000 euros durante la vigencia del acuerdo marco.

La segunda parte escogía a las empresas que han de acometer obras de presupuestos comprendidos entre los 500.000 y 1.800.000 euros. Para este lote se presentaron un total de 45 empresas, una de las cuales fue rechazada. De las restantes, fueron elegidas 15 firmas que serán las únicas capacitadas para trabajar en los carriles bici de Barcelona. En este apartado compitieron todas las grandes compañías que suelen trabajar para el Ayuntamiento de Barcelona, así como para otras administraciones.

No faltan las grandes 

Entre las empresas escogidas se encuentran nombres tan conocidos como Copisa, Copcisa, Constraula, Benito Arnó e Hijos, Acsa, FCC Construcción, José Antonio Romero Polo, MiJ Grúas, Sorigué, Construcciones Rubau, o Serveis Integrals Rubatec. Son todas ellas empresas con decenas de contratos municipales desde hace años. A la lista, hay que añadir Excavaciones y Construcciones Benjumea, Voltes Connecta, CRC Obas y Servicios y la unión temporal de empresas (UTE) Coynsa 2000-Conexa. Para las obras de esta compañía se contempla un presupuesto máximo de 145.200.000 euros durante toda la vigencia del contrato.

Para clarificar el acuerdo, las empresas podían optar a presentarse a las dos opciones de contrato, pero habían de escoger sólo una. Con ello, las obras municipales se abren a una mayor pluralidad de empresas. Según las cláusulas de la selección, las empresas podían presentar oferta para cada uno de los dos lotes “pero sólo podrán ser adjudicatarias de uno de ellos y, excepcionalmente, de los dos”. Por ello, debían “manifestar el orden de preferencia en la adjudicación”. Pero también especificaban las cláusulas que “únicamente una empresa podrá ser adjudicataria de los dos lotes siempre y cuando en uno de ellos se haya conseguido el número máximo de empresas indicado”.  Pero la afluencia de empresas fue masiva y por ello ninguna empresa puede estar presente en las dos tipologías de contratos.

Solo carriles bici 

Las obras a realizar son las de implantación de nuevos carriles bici donde los responsables municipales decidan, la reconfiguración y cambios de sección, las actuaciones de renovación integral de urbanizaciones y, en general, las actuaciones de mejora del espacio público. No obstante, quedan específicamente excluidas de estos contratos todas las obras que no afecten a carriles bici. En concreto, en las cláusulas del acuerdo marco se cita la prohibición de contratar actuaciones de edificación, obras en espacios ajardinados y parques, obras de instalaciones o de mantenimiento, obras marítimas o suministros.

Barcelona tiene, en estos momentos, más de 1.150 kilómetros de itinerarios de carril bici a disposición de los ciudadanos. En esta red se incluyen los carriles, las calles 30 (con la velocidad limitada a 30 kilómetros por hora), los ejes pacificados, las supermanzanas y los parques. Por los carriles bici sólo pueden circular bicicletas, vehículos de movilidad personal y ciclos de más de dos ruedas. Por ellos no pueden caminar los viandantes ni vehículos motorizados. Las bicicletas, además, tienen prioridad de paso respecto al resto de los vehículos a la hora de hacer giros a derecha o izquierda.