Barcelona condiciona la unión del tranvía por la Diagonal a la aprobación de presupuestos en el Ayuntamiento y Generalitat

El Ayuntamiento de Barcelona ha presentado este jueves, 1 de agosto, el proyecto de reurbanización de la segunda fase de la conexión del tranvía entre Verdaguer y Diagonal, un tramo que comprende desde la calle Girona hasta la avenida Sarrià. La teniente de Urbanismo Laia Bonet prevé aprobar inicialmente el proyecto a finales de este año para empezar las obras en verano de 2025, aunque advierte que se necesitan presupuestos tanto en el Ayuntamiento como en la Generalitat para llevar a cabo la unión. 

Bonet ha recordado que el 68% de la ciudadanía se muestra favorable a la conexión, haciendo referencia al último barómetro municipal. Aunque la voluntad del Ayuntamiento es aprobar el proyecto antes de que termine 2024, para esto se necesita una “previa”. “Hace falta aprobar los presupuestos de 2025. Sin ellos, no será posible la unión”, ha remarcado Bonet. “Durante los próximos meses debemos conseguir consensos para encontrar la financiación de la infraestructura. Todos los grupos deben ser coherentes con sus posicionamientos”, ha asegurado Bonet, quien ha pedido explícitamente el voto favorable a Barcelona en Comú a los presupuestos del próximo año. Precisamente, este miércoles, los comunes de Jéssica Albiach presentaron su acuerdo con el PSC para la investidura de Salvador Illa como president de la Generalitat. Entre los puntos del pacto se encuentra la unión del tranvía.

Inversión millonaria

El gobierno municipal pagará 114 millones para los proyectos de reurbanización (55 millones) y para la implantación del colector (59 millones). Paralelamente, la Autoritat del Transport Metropolità (ATM) tendrá que tramitar el proyecto de la infraestructura del tranvía, que incluirá tres paradas nuevas: Diagonal – Cinc d’Oros, Balmes y Casanova. El presupuesto, todavía pendiente de detallar por parte de la Generalitat, oscilaría en unos 100 millones, según Bonet. En total, la inversión para la conexión ascendería a los 200 millones de euros y las obras durarían unos 40 meses.

Reurbanización en tres actuaciones

El proyecto de reurbanización afectará a un tramo de unos 2,8 kilómetros y se llevará a cabo en tres actuaciones diferenciadas.

En la primera fase, entre paseo de Gràcia y paseo de Sant Joan, se construirán acercas más anchas, un tronco central con una plataforma para el tranvía y un carril bici en ambas direcciones, además de dos carriles para el tráfico privado por sentido en los laterales.

En la segunda actuación, comprendida entre paseo de Gràcia y Francesc Macià, se mantendrán las aceras actuales y sólo se actuará en el tronco central, espacio para el tranvía y la bici, y los coches en los laterales.

En el último tramo entre Macià y avenida Sarrià se renovarán las aceras de la plaza, se ajustará el carril bici para que dé toda la vuelta y se reordenarán los carriles centrales para ampliar la parada del tranvía y convertirla en un intercambiador modal de tranvía y autobuses.

Una vez finalizada la reurbanización se ganará 16.000 metros cuadrados de espacio público, casi 19.000 de verde y 8.700 para bicis.

Colector, necesario para evitar inundaciones

Para llevar a cabo esta transformación es necesario construir un nuevo colector entre la calle Girona y la plaza de Francesc Macià para reducir el riesgo de inundación. El nuevo colector, que dará continuidad al ya construido en Verdaguer, permitirá ganar una capacidad hidráulica de 60 cabales cúbicos por segundo, ya que tiene un cabal de 55 metros cúbicos más que el actual.

El tranvía de Glòries, listo en otoño

Tras años de debate, las obras de la primera fase del tranvía –entre Glòries y Verdaguer— empezaron en 2022. Dos años después, el tranvía circula en periodo de pruebas a la espera de que los viajeros puedan subirse a él en otoño de este año, según las previsiones del Ayuntamiento.