Publicada

Tras años de debates, obras y conflictos, este domingo 10 de noviembre, los primeros pasajeros ya han podido recorrer el nuevo tramo de tranvía que conecta la plaza de las Glòries con Verdaguer, en una jornada histórica que, sin embargo, no ha estado exenta de contratiempos.

La huelga de trabajadores del TRAM para exigir mejoras laborales obligó a cancelar el acto institucional de inauguración y la fiesta ciudadana que estaba programada para este sábado, dejando el estreno sin la esperada celebración.

La cancelación del evento oficial generó momentos de desconcierto. Este sábado, numerosos usuarios se acercaron a las nuevas estaciones, convencidos de que ya podrían utilizar el servicio, solo para descubrir que todavía no estaba operativo. Personal informativo del Tram estuvo presente para aclarar la situación, aunque muchos ciudadanos se marcharon con frustración.

Paradas del nuevo tranvía

A pesar de este arranque accidentado, el nuevo tramo de dos kilómetros entre Glòries y Verdaguer ya funciona, cubriendo la distancia en aproximadamente siete minutos y con paradas en cuatro estaciones: Glòries, Monumental, Sicilia y Verdaguer.

Esta primera fase ha supuesto una inversión de 63 millones de euros, correspondientes a 48 millones de obra civil y sistemas tranviarios y 15 millones en la fabricación de los tres nuevos tranvías.

La financiación de la obra civil y sistemas corresponde a la Generalitat (37 millones) y el Ayuntamiento de Barcelona (11 millones). En paralelo, el coste las obras de urbanización por parte del consistorio ha estado de 52 millones de euros, a los cuales se añade la inversión hecha por la construcción del colector, previa a la de la infraestructura tranviaria, de 8,1 millones de euros.

El siguiente reto: unir Verdaguer y Francesc Macià

Una vez completada la primera fase de la conexión por la Diagonal, el siguiente objetivo es completar la conexión entre el Trambesòs y el Trambaix, uniendo Verdaguer con la plaza Francesc Macià.

Aunque el proyecto ejecutivo podría estar listo a finales de año, el Ayuntamiento aún no ha fijado un calendario para el inicio de las obras, recordando que el avance depende de la aprobación de los presupuestos municipales.