La céntrica calle de Barcelona que estará cortada más de un año por las obras de la L8: todas las afectaciones

Barcelona vivirá durante más de un año una importante alteración en su red viaria a causa de las obras de ampliación de la línea L8 de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC).

Esta infraestructura, clave para mejorar la movilidad entre el Baix Llobregat y el centro de la ciudad, implica intervenciones profundas en varias zonas del Eixample y Sarrià-Sant Gervasi, con consecuencias directas sobre el tráfico rodado.

Calle Muntaner del distrito del Eixample de Barcelona Wikipedia

Una de las afectaciones más relevantes comenzará este domingo, 10 de agosto, con el corte total de un tramo de la calle Muntaner, una vía fundamental para la circulación en sentido mar.

Las autoridades ya han previsto desvíos, cambios de sentido y ampliación de carriles en calles próximas para minimizar el impacto, aunque se espera que la circulación en la zona se vea afectada de forma notable.

Afectaciones en la calle Muntaner

La Conselleria de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica de la Generalitat ha explicado que las obras de prolongación de la L8 de FGC obligan a cortar la calle Muntaner de Barcelona entre las calles Laforja y Marià Cubí durante 13 meses.

El corte, que se iniciará este domingo, debe servir para construir una de las salidas de emergencia del futuro túnel del nuevo tramo de FGC y los conductores deberán desviarse por itinerarios alternativos.

Generalitat y Ayuntamiento de Barcelona han acordado varias medidas como un cambio de sentido de la calle Amigó entre Via Augusta y Travessera de Gràcia desde el pasado 27 de julio.

Barcelona modifica el sentido de la calle Amigó por las obras de la L8: fechas y afectaciones

Más capacidad en Via Augusta

Además, desde este viernes se ampliará la capacidad de la Via Augusta en sentido Besòs entre Muntaner y Balmes, que contará con dos carriles por sentido.

Plano de la zona afectada por el corte de la L8 Gencat

También se ha reconfigurado el cruce con Balmes para ganar la capacidad del tráfico que baje por Muntaner, de forma que se pueda desviar por Via Augusta y recuperar el sentido mar en Balmes, y se habilitará el giro a la izquierda de Via Augusta hacia Balmes para mantener el sentido montaña.