El mercado de Núria, en Ciutat Meridiana, tiene los días contados. El equipamiento sobrevive medio abandonado con una sola parada abierta –una frutería- y dos bares. El mercado no tiene aún una fecha concreta de cierre, pero pronto bajará la persiana. El Distrito de Nou Barris y el Instituto de Mercados de Barcelona ya están estudiando que usos darán al espacio. Lo más probable es que el edificio, de titularidad municipal, acabe albergando algún establecimiento alimentario, para garantizar las necesidades de los vecinos, y un equipamiento para entidades del barrio.
El mercado de Ciutat Meridiana, construido en 1966, presenta ahora un aspecto desolador. No se ha hecho ninguna reforma integral. El hierro de las persianas bajadas es el color que predomina. De las 17 paradas abiertas hace unos años sólo queda una frutería y dos bares. Otra parada, una tocinería, estaba cerrada por vacaciones, pero ya no volverá a despachar. Hace un par de años que se habla de clausurar el recinto.
REALOJAR LA FRUTERÍA
Desde hace 29 años, al frente de la frutería, está Manuel Martín. “Llevamos una década de decadencia. Los últimos dos años han cerrado cinco paradas. Antes, en Ciutat Meridiana, había mucha gente que compraba en el mercado. Todos nos conocíamos. Con el boom inmobiliario, mucha de esta gente vendió la casa. Después, vino la crisis y llegaron al barrio muchas personas que no tienen cultura de mercado”, subraya.
Martín está negociando con el Ayuntamiento qué hace. La principal opción pasa por realojar la parada en algún otro mercado municipal o en el entorno, aunque no está descartado que cierre. En una situación similar se encuentran los dos bares que siguen abiertos. Según la concejala de Nou Barris, Janet Sanz, uno quiere cerrar y al otro hay que buscarle una salida. Probablemente, cuando se hayan solucionado estos casos, el mercado cerrará.
Josefa es la titular de uno de estos bares. Ella no se plantea cerrar y quiere que la recoloquen en otro mercado municipal. “Llevo 11 años en este negocio. Cuando empecé, la mayoría de paradas estaban abiertas. Tengo una clientela fija y alguna gente que viene de fuera. Pero tal como está el mercado, el negocio no tiene futuro”.
El presidente de la Asociación de Vecinos de Ciutat Meridiana, Filiberto Bravo, piensa que el mercado cerrará en diciembre. Los comerciantes hablan de enero. Pero, de momento, el Ayuntamiento no pone fecha a la clausura. Aunque no tardará demasiado.
ESPACIO PARA LAS ENTIDADES
“Si el mercado de Núria ha dejado de ser lo que fue es porque ha habido un desuso. Si sólo queda una parada es evidente que la viabilidad económica y alimentaria no están garantizadas”, destaca la concejala. Y añade que se está estudiando que el edificio se convierta en un equipamiento, con una parte alimentaria y otra que cubra necesidades vecinales. “Algunas entidades hace tiempo que esperan un espacio”.
El mercado de Núria se encuentra en la parte alta de Ciutat Meridiana, un barrio desigual y con muchas cuestas, situado en la falda de Collserola. El presidente de la asociación de vecinos dice que en esta parte del barrio cada vez cuesta más encontrar un comercio dónde comprar y que los supermercados están lejos, lo que afecta sobre todo a la gente mayor, con problemas de movilidad.
La concejala recuerda que a 10 minutos del mercado de Núria hay otro mercado municipal, el de Ciutat Meridiana, situado en la parte baja del barrio, para que la gente pueda comprar. Fuentes municipales consultadas por Metrópoli Abierta aseguraron que en este mercado ya se está trabajando con los comerciantes para dar un nuevo impulso al equipamiento y, entre las posibilidades, se estudia mejorar la accesibilidad entre la parte alta y baja de Ciutat Meridiana con un bus de barrio para que los vecinos con más problemas de movilidad se puedan desplazar hasta allí.