¿Qué es un ‘videowall’ y qué usos tiene?

Dentro del mundillo de los formatos de contenidos audiovisuales, podemos encontrar cada vez más y más propuestas diferentes. Cualquiera ha visto o usado ya un monitor táctil o una pantalla 4K, pero siempre hay margen de mejora e innovación en este terreno.

De hecho, en los últimos años se ha potenciado la figura del videowall. Una propuesta de lo más interesante por su capacidad para ofrecer contenido de alta calidad en grandes dimensiones, pero también por todas las posibilidades que brinda tanto a usuarios como a empresas o negocios. Vamos a profundizar en esta figura.

EN QUÉ CONSISTE

Un videowall es un conjunto de monitores que trabajan de forma coordinada para hacer de videoproyectores. Unidos y conectados en conjunto a una central que envía la información, logran crear una superficie de tamaño personalizado, en ocasiones realmente grande, para poder emitir cualquier formato que se desee.

Al final, este conjunto acaba actuando como una pantalla grande o incluso como una matriz para mostrar diferentes contenidos al mismo tiempo. El número de monitores a usar es variable y depende, principalmente, del uso que se le quiera dar. 

Si quieres ver algunos usos diferentes, aquí tienes alguna que otra opción disponible en la actualidad. No obstante, a continuación vamos a ver en profundidad los usos que se le puede dar a esta forma de comunicación audiovisual.

ELEMENTOS ESENCIALES

Dejando a un lado la cantidad de pantallas, se podría decir que hay tres elementos fundamentales para poder tener un buen videowall. La trinidad de este formato es la que se encarga de darle vida y hacer que tenga esas características tan peculiares que tiene, aunque cada uno de los elementos es de lo más común.

En primer lugar, se necesitan monitores profesionales para poder darle forma. Debemos tener en cuenta que muchas veces este formato está funcionando durante todo el día y toda la semana. Debe ser algo preparado para emitir continuamente la imagen que le corresponda, sin retrasos de ningún tipo y sin pérdida de calidad en la emisión.

Asimismo, la segunda parte es el propio contenido a emitir. Si, tan importante es el formato de salida como aquello que se debe mostrar. Para que sea algo efectivo y que de verdad cause impresión en el público, debe ser contenido audiovisual con una gran calidad de imagen y con atractivo tanto en formas como en mensaje. Por supuesto, el sonido debe acompañar.

Lo último, aunque no por ello menos importante, es el controlador de la imagen. Este, que va acompañado de un procesador, es el que se encarga de recibir la señal de entrada, dividirla y repartirla en las pantallas correspondientes de forma precisa y coordinada.

USOS DIVERSOS

La utilidad que se le pueden dar a un videowall varía en función de la estructura con la que este se plantee. Como ya hemos mencionado, este formato es, en realidad, una agrupación de pantallas que emiten imágenes de forma simultánea y/o coordinada, por lo que se puede aprovechar de muchas formas distintas.

La utilización más habitual es la de ejercer, en conjunto, como una pantalla de grandes dimensiones. Se realiza una emisión a pantalla completa para mostrar contenido a gran tamaño, sirviendo especialmente para poder verse con facilidad incluso desde la lejanía. Cada monitor proyecta una parte de la imagen en conjunto, llegando a agruparse hasta más de 16 pantallas al mismo tiempo.

Otro uso habitual es mostrando información distinta en cada pantalla, como la matriz de la que hablábamos antes. Aquí, en un mismo bloque, cada monitor emite algo distinto, de forma que se puede brindar muchísima información rápidamente y con claridad a cualquier espectador. Si alguna vez has mirado las bolsas de comercio, esas pantallas ejemplifican a la perfección este modo de empleo.

La última forma es la más avanzada y, también la más llamativa. No se limita solo a mostrar contenido, sino que también fomenta la interacción del espectador con las pantalla. A través del uso de pantallas táctiles, este formato puede ofrecer toda una realidad virtual a los usuarios.

EL USO TÁCTIL ES LA ESTRELLA

Debemos profundizar en esta última forma de uso, porque plantea un escenario de lo más interesante y amoldado a la vanguardia tecnológica. Las diferentes pantallas táctiles permiten a los usuarios interactuar, obtener información o incluso disfrutar de experiencias interactivas divertidas y envolventes. Algo que, por cierto, cada vez va cobrando más y más fuerza en el sector publicitario.
Todo esto es lo que ha hecho que el videowall cada vez sea más popular y utilizado en diferentes sectores. Si quieres hacer algo grande, que impacte y que encandile al público, quizás debas plantearte usar este formato tan ambicioso.

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