Los coches siniestrados pueden rendir beneficios económicos a sus propietarios

Hay accidentes que dejan a los vehículos inservibles por completo. En algunas ocasiones, aparentemente, la carrocería no ha sufrido un gran daño, pero la parte vital del motor o cualquier otro elemento estructural hacen más factible el cambio de vehículo que el arreglo. Tras las evidencias que marcan la inutilidad, por haber sido fortuitamente alcanzado por un gran impacto o cualquier otra avería mecánica, lo que queda evidenciado es que jamás se va a poder volver a utilizar. Así pues, cuando se dan algunas de estas circunstancias es cuando se denomina que el coche está en siniestro total. 

Si la fortuna ha jugado de parte del conductor y los ocupantes incluso los seguros pueden resarcir económicamente los contratiempos sobrevenidos, pero eso no implica que el vehículo pueda circular nunca más. ¿Qué hacer entonces? ¿Cómo deshacerse de un vehículo que está siniestrado en tal magnitud? 

La importancia de la tasación profesional

En este caso, es posible que haya desguaces que procedan a la compra de coches siniestrados, para hacerlo más atractivo hacen una tasación profesional del vehículo y ofrecen, generalmente, entre un 20% y un 40% más de lo que harían otros establecimientos. Por esa razón son muchos los clientes que acuden a estos servicios de tasación buscando un rendimiento económico tras el siniestro o accidente. 

Otro de los atractivos más destacables de estas empresas es que los clientes no tienen que realizar ninguna burocracia una vez se deposita el vehículo. En ocasiones, tras el accidente, lo que menos quieren estas personas es tramitar bajas, acudir a oficinas o perder tiempo, pues bien, los departamentos administrativos de estos desguaces hacen todo ese trabajo. El cliente solo recibe el dinero y firma los documentos con el desguace y él mismo se encarga de dar de baja el vehículo en la DGT y todos los organismos que así lo precisen. Una ventaja que, añadida a las anteriores, ofrecen empresas como Desguace El Poyo. 

Así es de fácil es vender un coche siniestrado

Gracias a las nuevas tecnologías se han ampliado, enormemente, las posibilidades de contacto, también de tasación. Por ese motivo, la compañía ofrece un servicio online de transmisión de información y documentación sobre el vehículo. Lo primero que tienen que hacer los expertos y peritos es tasar el vehículo. Eso implica tener que rellenar una ficha específica para ese fin y adjuntar una serie de fotografías con calidad que den oportunidad de realizar esta baremación con el máximo rigor. 

Al mismo tiempo, precisan conocer algunos datos personales del propietario del vehículo a fin de contactar con la máxima brevedad posible. En este momento del proceso, observarán minuciosamente el vehículo con el objetivo de ofrecer el mayor precio de tasación. Sin lugar a dudas, es un desguace en Sevilla muy utilizado y el que mayor tasa de satisfacción recibe por parte de su clientela. 

Rapidez y comodidad

Por su parte, la compañía se compromete que entre las primeras 24-48 horas la tasación final estará realizada; es más, en caso de necesitar información adicional un experto contactará con el cliente para requerir esa información. En ningún momento el cliente ha de moverse de su domicilio, ya que, de aceptar la oferta, el próximo paso consiste en concertar una fecha y hora para la retirada del vehículo. 

¿Quién lo recoge? Irá una grúa especializada, en ese momento harán firmar una serie de documentación que será la que permita dar de baja al vehículo sin tener que ir a ninguna oficina. Se hace la transferencia económica, que cabe hacerla en efectivo o a través del banco. Es muy rápido, útil y sencillo. 

La dificultad de colocar ese vehículo en el mercado

La lógica es aplastante, un vehículo siniestrado no lo quiere ningún particular, salvo la rara excepción que confirma la regla. Son, por tanto, los desguaces los que sí acceden a la compra o, en otras muchas ocasiones, los que llegan es a un acuerdo con el dueño para la retirada y tramitación de baja gratuitas, pero sin dar nada por el vehículo que se entrega. 

Entonces ¿por qué perder dinero pudiendo sacar una rentabilidad del vehículo siniestrado? Si, eso es lo mismo que hace este desguace, pero además, tasa el vehículo y le da un valor. Todas son grandes ventajas evidentes para el cliente. 

Algunas ventajas a tener en cuenta

Es posible que el accidente que haya provocado la siniestralidad del vehículo también implique una situación personal, emotiva y de salud complicada; todos esos motivos, también hacen que esta compañía sea lo más flexible posible. Una de las premisas esenciales es que los clientes no se tengan que desplazar en absoluto, ni siquiera tener que tratar físicamente con nadie, más allá de la persona que recoge el vehículo. 

Por todo ello, ayudan en un escollo que puede ser traumático para los accidentados. Facilitar la vida de los clientes, que no tengan que acudir a otras administraciones y que, además, saquen un rendimiento económico por un bien que ya no les da utilidad ninguna puede ser una buena fórmula que agradecen estas personas. 

El contacto con los expertos para resolver cualquier tipo de dudas también suelen ser a través de aplicaciones sencillas como el Whatsapp. Aquí se han unido tres factores, la gran profesionalidad de las personas que ejercen su actividad laboral en el desguace en cuestión, también la sensibilidad con los clientes a la hora de tramitar la tasación, así como de conocer los resultados de las mismas y, por último, un rendimiento económico de un vehículo al que ya es imposible darle un uso práctico. 

En definitiva, el Desguace El Poyo tiene una enorme misión, la de asistir a sus clientes, atender sus necesidades burocráticas a través de las nuevas tecnologías y dar esperanza de venta a aquellos vehículos declarados siniestro total. Todas las partes salen aventajadas con la operación y, eso se traduce en una buena opinión de los clientes.

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