El empleado del FC Barcelona Juan José Castillo, que dijo por teléfono al expresidente del club Sandro Rosell que el trasplante del exjugador Eric Abidal fue ilegal, defiende que sus palabras se enmarcan en un contexto de broma y que "eran fabulaciones", y así lo declaró ante la jueza el viernes, ha explicado su abogado a Europa Press.

El letrado del trabajador, Eloi Castellarnau, ha asegurado que, en la declaración en el Juzgado de Instrucción 28 de Barcelona por la presunta ilegalidad del trasplante de hígado de Abidal, Castillo atribuyó la conversación telefónica intervenida con Rosell a "exageraciones" fuera de contexto.

“MUY DOLIDO CON ABIDAL”

También ha considerado que su cliente es una persona "muy hiperbólica a la hora de hablar" y que en el momento de la conversación con Rosell estaba dolido con Abidal, porque había criticado públicamente al expresidente del FC Barcelona.

“HUMOR DESAFORTUNADO”

Castellarnau enmarca la conversación telefónica en ese malestar sumado a un "humor y sarcasmo" de su cliente, que admite que pudo ser desafortunado.

El abogado está convencido de que la causa "tendrá poco recorrido" y considera que deberá archivarse en cuanto el Juzgado reciba los resultados de las pruebas médicas que están pendientes.

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