El empresario de la cadena de restaurantes Monchos, José Ramón Neira, ha conseguido que su marisquería Botafumeiro haya doblado sus ingresos del año 2021 y haya superado las pérdidas del 2020 a causa de la pandemia. El año pasado, sin embargo, Neira declaró a Hacienda que su buque insignia Botafumeiro había facturado casi nueve millones de euros, superando más del doble de 2020, que ingresó casi cuatro millones.
Neira forma parte del lobby de empresarios gallegos de hostelería que llegaron a Barcelona y montaron restaurantes que hoy en día son referentes gastronómicos de la ciudad. Inauguró el Botafumeiro en 1975 y actualmente es propietario único de quince bares y restaurantes en Barcelona y una nave industrial en Galicia. Modelo de empresario hecho a sí mismo, que paga impuestos, crea riqueza y aporta fama a Barcelona, ha resistido el intento de acoso y derribo de los inspectores de Colau antes, durante y después de la pandemia. Al igual que su colega, Silvestre Sánchez, propietario de los restaurantes Salamanca, por el hecho tener buenas relaciones con todos los cuerpos de policía de la ciudad.
Otro mérito de Neira es participar en la Noche de Galicia, que cada año reúne a más de mil gallegos influyentes y acuden invitados y personalidades que reciben los premios de la Enxebre Xuntanza do Percebe. Cada año cocina un restaurante gallego y se lucen por competir el Botafumeiro, Casa Castro, Carballeira, Rías de Galicia, Bicos, O meu lar y un selecto etcétera. Unas noches de embrujo que dan ganas de ser gallego.