Xavier Marcé

Al concejal de Cultura e Industrias Creativas, Xavier Marcé, le corresponden el honor, la gloria y la responsabilidad de despolitizar el Born y convertirlo en otro espacio arqueológico de Barcelona. Como museo que será, la primera labor de Marcè consistirá en borrar los restos de los desmanes ideológicos cometidos por personajes sectarios como Quim Torra, que fue su director, y Ada Colau, que lo vejó y humilló con una estatua de Franco decapitado y el caballo pintarrajeado. Asaltado y apropiado por independentistas y comuneros indocumentados, el magnífico edificio de hierro del antiguo mercado central y las piedras de un barrio derribado fueron sometidos a un lavado de cerebro y de imagen para transformarlo en templo patriótico y propagandístico de un sector de la ciudadanía. Derrotados en las urnas aquellos gestores tan ufanos y tan soberbios, el Born vuelve a ser patrimonio histórico de toda la ciudadanía.

Los restos arqueológicos de 1714 pasan a ser responsabilidad del Museu d’Història de Barcelona (MUHBA), dirigido por el geógrafo e historiador Joan Roca. De este modo, el Born  será otra parte del Mubha, que tiene más de una decena de espacios repartidos por toda la ciudad. Es como lo que Marcé llama “visión horizontal” de la ciudad, ya que el Born forma parte del relato de la ciudad y deja de ser símbolo del nacionalismo según Torra y de la memoria histórica según Colau. Sin olvidar la memoria sentimental de los bailes y eventos festivos que allí tuvieron lugar cuando la divertida Transición.