Las quejas de unos vecinos, que denunciaron molestias a la Guàrdia Urbana, han permitido a los agentes policiales descubrir y decomisar una plantación de 156 plantas de marihuana en avanzado estado de crecimiento.
La plantación, ubicada en la calle Santander del distrito de Sant Andreu, se alimentaba de electricidad ilegalmente, al tener pinchada la instalación. La Guàrdia Urbana ha detenido a un hombre al que acusa de delitos contra la salud pública y de defraudación del fluido eléctrico.
A raíz de las quejas de los vecinos, la Guàrdia Urbana inició una investigación de la que se confirmaron las sospechas de la existencia de la plantación. Tras pedir una orden judicial, los agentes pudieron entrar en el inmueble y decomisar las plantas.
Según la Guàrdia Urbana, la cosecha de marihuana habría alcanzado un valor potencial de 117.000 euros, por los 23 kilogramos que se calcula que habrían pesado al recolectarlas. Además de las plantas, los agentes también decomisaron los artilugios utilizados para mantener la plantación, que no cumplían con ningún tipo de medidas de seguridad.