El Poblenou se despide de la Iglesia de Sant Bernat Calbó
La grúa empieza a demoler el templo, cuyo solar servirá para ampliar la escuela de La Mar Bella
3 agosto, 2017 19:03Noticias relacionadas
- Cristalerías Planell, eficiencia al desnudo
- “La superilla hace la ciudad más amable, respirable y sostenible”
- Los pisos con más mugre de las inmobiliarias de Barcelona
- Las mejores heladerías de Barcelona
- Las 10 mejores bravas de Barcelona
- Dos años de prisión para dos turistas por estafar al hotel Arts
- Can Baró se moviliza para salvar su única plaza
- Cuatro encapuchados asaltan un bus turístico
La Iglesia de Sant Bernat Calbó ya es pasado. El Ayuntamiento de Barcelona ha iniciado su derribo para ampliar la escuela de La Mar Bella. Muchos vecinos se han acercado este jueves a ver el inicio de la demolición y han grabado cómo caían las primeras piedras. Alguno comentaba que era un momento “histórico” para el barrio del Poblenou.
El anterior equipo municipal aprobó la construcción de un monasterio en el solar de la Iglesia de Sant Bernat Calbó. El Arzobispado descartó la remodelación del templo, que presentaba grandes deficiencias estructurales, por lo que aprobó ceder el terreno a las Hermanitas del Cordero, una congregación de origen francés, que iban a construir el monasterio Llum del Anyell en su lugar.
Pero el proyecto se detuvo cuando Ada Colau llegó al Ayuntamiento. Vecinos de la zona se habían movilizado para pedir que el solar pasara a titularidad pública y habían recogida firmas. Tras negociar con las partes, el consistorio adquirió el terreno por 818.672 euros y aprobó destinarlo a la ampliación de la Escuela La Mar Bella, situada en el solar contiguo.
UN GIMNASIO Y UNA BIBLIOTECA
Las obras se prolongarán durante dos años y prevén la construcción de un gimnasio, una biblioteca y un aula ambiental, que irán en el solar que hasta ahora ocupaba la iglesia. También se remodelará uno de los edificios de la escuela, el más cercano a la parroquia, y ya se han colocado dos barracones en un solar de la calle Galceram i Marquet, para que los niños hagan clase mientras duran las obras. Allí estudiarán los grupos de infantil y primaria.
El gimnasio estará a nivel de calle, mientras que la biblioteca irá en la primera planta y encima el espacio verde que se usará como aula ambiental. Según ha declarado el Conseller del Distrito de Sant Martí, Josep Maria Montaner, estos equipamientos estarán abiertos al barrio fuera del horario lectivo.
Los trabajos de demolición, que se han iniciado este jueves y que se prolongarán durante tres semanas, supondrán un coste de 60.000 euros. El solar ha de estar vacío para finales de agosto, para que los niños no acudan a clase rodeados de escombros y polvo.
La iglesia ya ha perdido el porche de la entrada y poco a poco, durante estas tres semanas, la grúa irá derribando el resto de la estructura. Simultáneamente, un operario remoja los escombros para evitar que se levante polvo, pues la iglesia se encuentra en el medio de la plaza de Bernat Calbó, rodeada de edificios de viviendas.
El edificio, de poco valor arquitectónico, acogió en julio de 2013 a 50 personas de origen subsahariano cuando fueron desalojadas de las naves del Poblenou donde dormían. Allí durmieron durante varios días y protestaron por la persecución a la que denunciaron que se vieron sometidos.