Llega junio y los colegios empiezan a vaciarse, aunque no será hasta el 22 que se cierre el calendario escolar 2017-18 en la comunidad autónoma catalana. También las escuelas que no son estrictamente de aprendizaje clásico (mates, ciencias varias, lenguaje, etc.) echan la persiana, porque el verano despunta en el horizonte y los infantes ya sueñan con las vacaciones.
Este sábado, una de las que ha celebrado que se acerca el fin de curso es ‘La Filigrana’, una escuela de danza y movimiento sita en la calle D’En Grassot, en el distrito de Gràcia, que ha escogido un lugar histórico de otro distrito, el de Sant Martí, para, en su caso nunca mejor dicho, bajar el telón.
El lugar elegido ha sido nada menos que el emblemático Teatre Casino l’Aliança del Poble Nou, un edificio monumental que dio cobijo a una entidad de carácter recreativo, cultural, social y mutualista fundada en 1868 por Lluís Remisa como Sociedad la Alianza. Allí, junto a la muy turisteada Rambla del Poble Nou, en las viejas tablas de su Gran Sala por las que han pasado gente como Joan Capri, Mary Santpere, Tete Montoliu o Enric Majó, ante casi un millar de personas han actuado un centenar de bailarines, desde los más pequeñajos hasta los adultos, con un final de fiesta especial brindado por la directora y su ayudante, Ingrid López Belmonte e Irene Santos Bartrons.
El programa ha sido variado, tocando desde la danza clásica hasta el jazz, pasando por los bailes modernos, contemporáneos y el dance, con guiños a famosos temas teatrales y cinematográficos (‘Mary Poppins’, ‘La La Land’, ‘Moulin Rouge’, ‘Sonrisas y lágrimas’, ‘Don Quijote’, ‘Amélie’, ‘Chicago’, etc.) que se han ganado siempre los aplausos de los presentes.
El festival de danza de 'La Filigrana' ha llevado por título ‘Circus’, y tal que ha sido, por la variedad de temas, de actuaciones, de canciones y de bailes. Un ‘melting pot’ en el que ha cabido de todo y en el que todo ha tenido su sitio, complementando una velada -más bien vespertina- que ha colmado las apetencias de cuantos han acudido a la cita.
A la salida, cientos de personas en torno al viejo teatro, hasta el punto de llamar la atención a quienes, por sorpresa, se han dado de bruces con ella, paseando por La Rambla.
-¿Qué pasa? ¿Quién ha actuado? ¿Alguien famoso, con tanta gente en la calle?
Pues no, ningún famoso. Sólo un centenar de ilusionados jóvenes cargados de futuro.