El Ayuntamiento de Barcelona ha pacificado una buena parte de las calles de los Almogàvers y de Zamora, ambas en el distrito de Sant Martí. En total, el gobierno de Ada Colau y Jaume Collboni ha intervenido en 14.000 metros cuadrados de superficie en forma de plataforma única [ver aquí la nota de prensa municipal].
Concretamente, las actuaciones se han hecho en el tramo de Almogàvers, que va desde Joan d'Austria a Pamplona, y en Zamora, desde Almogàvers a Pere IV. En la mayor parte del espacio se han habilitado parterres, árboles y zonas de paseo y para bicicletas. La inversión ha sido de 7,8 millones de euros.
CUATRO GRANDES PLAZAS
La pacificación de las calles ha dado lugar a una gran plaza en la confluencia de Almogàvers con Zamora, de unos 2.000 metros cuadrados, justo delante del tanatorio de Sancho de Ávila. En un futuro se crearán plazas similares en los cruces de Puigcerdà con Veneçuela, Bolívia y Cristòbal de Moura.
La zona pacificada es una zona de ocio nocturno que se ha convertido en un castigo para los vecinos desde hace años por los constantes ruidos y fiestas callejeras, a las puertas de los establecimientos. Entre otros locales de la zona están Razzmatazz, L'Ovella Negra, Merlín y Wolf. Vecinos consultados por Metrópoli temen que la pacificación comporte más botellones.
El objetivo municipal es convertir una de cada tres calles del distrito tecnológico del 22@ en un eje verde. En la calle de Almogàvers se han eliminado cuatro carriles de tráfico y dos hileras de aparcamiento, mientras que en Zamora se ha quitado dos carriles de circulación y otros dos de estacionamientos.
UNOS 20 MILLONES HASTA 2023
Hasta 2023, el Ayuntamiento habrá invertido más de 20 millones en la ejecución de ejes verdes en Sant Martí. Hay previstas intervenciones en las calles de Cristòbal de Moura, Puigcerdà y Bolívia.