
Lito Malla Segala Barcelona
Del Besòs a Nueva York: Lito, el joven gitano que rompe las barreras del teatro 'de barrio'
El actor, criado en La Mina, utiliza el teatro como vía de empoderamiento, demostrando cómo el arte puede ser una alternativa en comunidades excluidas y olvidadas de Barcelona
En los barrios de El Besòs y La Mina, donde la exclusión social ha sido una constante durante décadas, "la falta de oportunidades" pesa sobre cada rincón.
En este entorno, las artes se sienten como "un lujo ajeno", explica Metrópoli Lito Malla, un joven gitano que ha encontrado en el teatro una herramienta de "empoderamiento y resistencia". El chico, un "apasionado" de la interpretación, lucha a diario para que su pasión personal sea "un puente para que otros jóvenes de su comunidad descubran nuevas oportunidades".
Hoy, gracias a su empeño, muchos jóvenes del barrio han logrado algo que jamás habrían imaginado: viajar a Nueva York y conocer de cerca la escena teatral estadounidense.
Empoderamiento a través del teatro
Lito, criado entre El Besòs y La Mina, se negó a "aceptar el destino que parecía escrito" para él. Marcado desde niño por "el estigma y los prejuicios que pesan sobre su comunidad", decidió dar un paso más.
En un entorno donde el teatro parecía un territorio distante, Lito lo transformó en un vehículo de resistencia, demostrando que la cultura "también pertenece a quienes han sido históricamente relegados".
Director de teatro y educador en Associació d’Arts Escèniques per a Joves Lito, ha dedicado su vida a usar el teatro como "vía de escape" para la juventud de su barrio.
Del Besòs a Nueva York
Más allá de Nueva York, Lito también ha organizado viajes a grandes capitales del teatro como Londres o París con sus alumnos. "Son personas que, en muchos casos, casi ni han salido del barrio. Verles allí, en Nueva York, es una sensación increíble", confiesa emocionado.

Imagen de una escena de la obra 'Campeone' interpretada en 2019 por los alumnos de la Associació d’Arts Esceniques per a Joves
Su prioridad, la formación
"Mi infancia fue dura porque era el único de mi entorno que estudiaba", recuerda. Mientras que sus amigos preferían jugar en las calles o seguir caminos menos académicos, él insistía en formarse.
"Todos mis amigos me intentaban llevar por su camino, pero yo tenía claro cuál era mi sueño", añade.
Sus primeros pasos
Sus primeros pasos sobre el escenario se remontan a la escuela primaria, cuando participó en una representación de El Mago de Oz. Aquel momento marcaría un antes y un después en su vida. “Allí conecté, actuando, y me di cuenta de que, por un instante, todos los problemas desaparecían. Podías jugar, transformarte, ser quien quisieras ser”, recuerda.
Fue entonces cuando entendió que el teatro no era solo un arte, sino una forma de liberación tanto personal como colectiva.
La interpretación se convirtió en su amparo durante la adolescencia, una etapa en la que, según dice, la soledad lo acompañó como nunca antes. "Fui el único de toda la primaria que terminó en un instituto fuera del barrio. Empecé mi adolescencia muy solo", confiesa.

Escena del musical 'Mamma Mia' por los alumnos de la Associació d’Arts Esceniques per a Joves
En esos momentos de soledad, encontró un pilar en su familia, que lo respaldó siempre, algo que él considera esencial. "Hay quienes no cuentan con ese apoyo, y eso hace que todo sea mucho más difícil", reflexiona.
Contra las barreras sociales
Subirse a un escenario le permitió vencer la timidez y comenzar a tejer nuevas relaciones. “El teatro es una herramienta de transformación, porque gracias a él pude trabajar en mí mismo, dejar atrás la vergüenza, aprender a comunicarme con los demás y, sobre todo, hacer amigos”.
Por ello cree que, como profesor de teatro, puede ayudar a sus alumnos a “redescubrirse” y a construir un futuro donde las barreras sociales ya no definan su destino.

Escena del musical 'Mamma Mia' por los alumnos de la Associació d’Arts Esceniques per a Joves
"Gracias a las becas estoy donde estoy"
Sin embargo, el camino hacia la formación profesional no fue sencillo, sobre todo por motivos económicos. "Acceder a una escuela de teatro era muy caro", lamenta.
"Cuando fui haciéndome mayor, empecé a trabajar para poder formarme", recuerda. Y gracias a las becas, Lito logró continuar con su educación. "Sin esas becas, creo que no estaría donde estoy. Gracias a ellas pude estudiar", agradece.

Escena del musical 'Mamma Mia' por los alumnos de la Associació d’Arts Esceniques per a Joves
Por eso, a pesar de los "prejuicios que enfrenta", Lito nunca ha permitido que su identidad lo frene. "Crecí en una familia que no era pobre, pero que no tenía grandes recursos. Al final, ves de dónde vienes y entiendes por qué quieres hacer teatro", reflexiona.
"Expresarse sin miedo"
Para él, el teatro es una manera de alzar la voz y reivindicar lo que muchas veces se silencia: "El teatro es una manera de expresar lo que los demás no quieren que hagas y digas. Es la manera de ponernos esa máscara, que no sepan que somos nosotros, y camuflarlo un poquito."
Lito tiene claro que la juventud de su barrio necesita un espacio donde pueda desarrollarse y expresarse sin miedo. "El teatro puede impactar profundamente a los adolescentes, porque psicológicamente llegan con muchas dificultades", asegura con firmeza.

Escena del musical 'Mamma Mia' por los alumnos de la Associació d’Arts Esceniques per a Joves
El trabajo en grupo y la creación colectiva dentro del teatro son, para Lito, claves para que los jóvenes se sientan acompañados y comprendidos. "Lo que he logrado con estos adolescentes es que no se sintieran solos, como me pasó a mí. A través del teatro, pueden ponerse en la piel de los demás, y eso hace todo más fácil", explica con convicción.
Del barrio a las pantallas de cine
Una historia que llena de orgullo a Lito es la de una joven que, tras sufrir bullying y sentirse excluida, encontró en el teatro el espacio para liberarse y expresarse. "Ella rompió esas ideas preconcebidas de que no podía ser vista de otra manera", recuerda.
Años después, la joven regresó a sus clases de teatro, orgullosa de haber sido seleccionada para una película. "Eso para nosotros es un orgullo", añade el profesor, que celebra "una victoria colectiva".

Escena del musical 'Mamma Mia' por los alumnos de la Associació d’Arts Esceniques per a Joves
La ambición de Lito por llegar más lejos no se detiene. En este momento, trabaja en dos proyectos de gran envergadura: un musical de La Bella y la Bestia que se llevará a cabo en el barrio del Bèsos, con la participación de más de 50 personas de la comunidad.
También tiene entre manos un proyecto sobre las mujeres en las obras de Lorca, con un grupo de actrices gitanas. "Es un teatro de texto que no suele ser tan conocido, pero decidí embarcarme porque la temática de la mujer gitana me toca de cerca", afirma con determinación, consciente de la importancia de llevar adelante estas iniciativas que no solo buscan transformar, sino también visibilizar historias que han quedado en el olvido.
La importancia del apoyo institucional
A pesar de todo, Lito no olvida que el respaldo institucional es esencial para que proyectos como el suyo puedan seguir creciendo. "Si el ayuntamiento y quienes tienen el poder apuestan por iniciativas como esta, creo que el teatro perdurará en el barrio. Si se da espacio al arte, crecerá", asegura con esperanza.