Temor en el sector de las funerarias a un colapso del único crematorio de la ciudad de Barcelona. Cementiris de Barcelona asegura la operatividad de los cuatro aparatos del horno de Montjuïc, que mantiene el monopolio de la incineración en la ciudad condal. El sector tiene muchas dudas sobre ello, especialmente si el número de víctimas mortales por coronavirus sigue creciendo.
Una portavoz de la empresa municipal ha insistido en que "la operativa de cremación está garantizada". Aunque la misma fuente también dice que las medidas tomadas en la instalación son "las que han dictado las autoridades sanitarias al tratarse de un servicio esencial". Según la voz oficial, Cementiris "garantiza el 100% de los entierros y el 100% de las cremaciones".
¿GARANTÍA TOTAL?
Según informa Crónica Global, la versión oficial que presenta la sociedad pública que dirige Miquel Trepat no es compartida por los operadores. Fuentes del sector recuerdan que el único crematorio operativo en Barcelona, el del Cementerio de Montjuïc, ya colapsó a principios de enero por un "repunte de muertes por la gripe estacional".
Ahora creen que la única instalación disponible en toda la ciudad (porque el crematorio de Collserola está cerrado por contaminar el parque natural) debe gestionar los cerca de 8.000 fallecimientos convencionales más los que provoca el famoso virus.
DE MOMENTO, 18 FALLECIDOS
Precisamente, las mismas voces señalan que Cataluña presentaba en el último corte estadístico presentado el lunes por la tarde por el Departamento catalán de Salud 1.394 casos de Covid-19, incluyendo el contagio de Quim Torra, presidente de la Generalitat.
Las muertes por complicaciones derivadas del patógeno se elevan a 18 en todo el territorio, de las cuales 12 son de la zona de Igualada (Barcelona), una población en confinamiento. "¿Qué pasa si aparecen clústeres de casos en Barcelona ciudad? Dará de sí la operativa de Cementiris?", comparten fuentes de varias compañías del sector.
LOS ANTECEDENTES
El temor de la industria parte de una renqueante operativa de Cementiris de Barcelona. La empresa tuvo que recortar al 50% el servicio de cremaciones en mayo de 2019 porque la instalación de Collserola no pasó las exigencias de protección del medio ambiente impuestas por la Generalitat.
Después, la firma aseguró que solo se estaba acometiendo una "renovación integral" de un equipamiento abierto en los años 80. De una posible reforma no se sabe nada y de su reapertura, tampoco. Las obras continúan sin fecha de finalización y, toda la carga de cremación de Cementiris, desviada a Montjuïc.
Esto comporta cargar los cuatro hornos de este crematorio con unos 8.000 cuerpos al año. A esta cifra se le suma ahora la sobrecarga que puede provocar el coronavirus si la curva de incidencia continúa sin frenarse. La empresa municipal está tranquila, pero el sector no lo está tanto.