Dos agentes de la Guardia Urbana de Barcelona salvaron este jueves por la tarde a un bebé de cuatro meses con "síntomas claros de asfixia". Los agentes fueron requeridos por la madre del menor, que se asustó al ver como su hijo no respiraba al estar de color azulado.
Los agentes, que estaban en la calle de Sants, llamaron al Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM) para que los sanitarios se ocuparan de salvarlo, pero, al ver "el estado grave" del bebé, le hicieron maniobras de reanimación y lo pudieron recuperar, según ha informado el Ayuntamiento de Barcelona este viernes en un comunicado. Poco después de que los agentes le practicaran la reanimación, la ambulancia del SEM trasladó al bebé al hospital y se encuentra fuera de peligro.
UN CASO SIMILAR
El pasado mes de abril tres mossos también salvaron la vida de un bebé que se asfixiaba en Barcelona. Al ver que sus padres estaban en estado de shock pusieron al recién nacido en posición de seguridad e iniciaron maniobras para evitar su asfixia. Cuando lograron que volviera a respirar lo trasladaron en su vehículo oficial a un ambulatorio para que fuese atendido.