La consulta estaba en un estado precario, sin las medidas sanitarias que se presuponen en una clínica dental, pero mantenía su actividad. La denuncia de un paciente que se sintió estafado con el tratamiento recibido desembocó en una investigación que ha finalizado con la detención del falso dentista en su clínica de la calle Espronceda.

Al detenido, un hombre de 56 años vecino de Sant Boi de Llobregat (Barcelona), los Mossos d'Esquadra le imputan los delitos de estafa y de intrusismo laboral al hacerse pasar por dentista y tener una falsa consulta en Barcelona en condiciones de insalubridad.

Según un comunicado difundido este viernes por los Mossos d'Esquadra, la investigación se desarrolló con rapidez. El 15 de abril un paciente presentó la denuncia en comisaría. Allí explicó que en 2015 pagó 1.580 euros para un tratamiento odontológico en una clínica de la calle Espronceda de Barcelona, pero que sólo le realizaron una extracción y unas curas.

Tras quedar descontento con el servicio recibido, el paciente intentó contactar sin éxito con el dentista, por lo que empezó a sospechar que había sido víctima de una estafa. Sus sospechas se incrementaron cuando descubrió que en la factura no había número de colegiado.

CLÍNICA EN MALAS CONDICIONES

Cuando los Mossos acudieron el 17 de abril a la clínica, en el distrito de Sant Martí, descubrieron que se encontraba en un estado precario y detuvieron al presunto profesional y a un ayudante.

Al pedirle la documentación, los dos hombres aseguraron que se encontraba en una gestoría de la que no recordaban el nombre. Ante semejante respuesta, los Mossos avisaron a la Guàrdia Urbana para que levantara una sanción administrativa, y finalmente el detenido que operaba como dentista reconoció que no tenía titulación.

Además, desde el Col·legi Oficial d'Odontòlegs i Estomatòlegs de Catalunya (Coec) les informaron de que el hombre no estaba colegiado ni habilitado para ejercer ninguna actividad médica, ante lo que los agentes pidieron al juez una orden de registro del local, donde hallaron instrumentos médicos sin garantías y documentación que probaba que la instalación funcionaba como clínica dental pese a encontrarse en pésimas condiciones de limpieza.

Mientras duró el proceso, llegaron a la clínica tres clientes que explicaron que se habían encontrado con situaciones similares a la denunciada. El detenido, de nacionalidad española, quedó en libertad con cargos tras pasar a disposición judicial y la investigación policial sigue abierta, por lo que no se descarta encontrar a nuevas víctimas de la estafa.

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