El pasado martes, un pasajero que realizaba la rutina Barcelona - Sevilla sembró el pánico entre la tripulación tras proferir gritos e insultos al resto de pasajeros.
Fuentes de la Guardia Civil han informado a Europa Press que todo ha ocurrido en un avión que había despegado la mañana de este martes sobre las 12.30h desde Barcelona con destino a Sevilla. Tras diez minutos de vuelo el hombre, que iba acompañado, empezó a chillar profiriendo frases sin sentido como "cristianos infieles".
Un hecho que hizo saltar las alarmas entre la tripulación y solicitar asistencia policial una vez aterrizado el avión. A pesar de que sus acompañantes alegaran que sufría alteraciones de comportamiento, una vez aterrizado el aparato, los agentes de la Guardia Civil procedieron a sacarlo del avión y sancionarlo por una infrancción de Seguridad Aérea.
RYANAIR CONDENA LO SUCEDIDO
Por su parte, Ryanair ha emitido un comunicado acerca del suceso diciendo que "la tripulación del vuelo Barcelona-Sevilla solicitó asistencia policial a su llegada al aeropuerto, después de que un pasajero se comportara de forma inapropiada durante el vuelo. El avión aterrizó normalmente y la policía desembarcó y detuvo a este individuo. No toleraremos ningún comportamiento inaceptable o perjudicial y la seguridad y la comodidad de nuestros clientes, tripulación y aviones es nuestra prioridad número uno".