Barcelona acumula a lo largo de este año 12 homicidios, según los Mossos d'Esquadra. Hasta junio, el último mes con datos oficiales, las muertes violentas en Barcelona eran siete. Sin embargo, los delitos de sangre con víctimas mortales se han disparado este mes. Hasta el lunes 29 de julio han sido asesinados otras cinco personas.
El número de homicidios en la ciudad ya es más alto en siete meses que en todo el año pasado, cuando se produjeron 10 víctimas mortales, indica el balance del Ministerio del Interior (página 158, ver aquí). De hecho, la cifra de asesinados en Barcelona ya es superior a todos los años desde 2013 con la única excepción de 2017. Ese año, la ciudad sufrió 28 muertes violentas, 14 de las cuales fueron el atentado de la Rambla. En 2013, 2014, 2015 y 2016, los homicidios en Barcelona fueron 10 por año.
BRUTAL PALIZA
El mes de julio acabará con, al menos, cinco homicidios. La madrugada de este domingo, un joven chino murió tras recibir una brutal paliza en el Port Olímpic a las puertas de la discoteca Zich por parte de un grupo de cuatro o cinco hombres de Europa del este. En el mismo incidente, otro chico, amigo de la víctima moral, resultó herido leve.
La agresión mortal en el Port Olímpic se produjo 48 horas después de otra muerte en el barrio del Raval. El jueves por la noche, un hombre magrebí de 44 años falleció tras ser apuñalado en la plaza de Foch i Torres tras una pelea con otro varón. La persona que murió fue agredido en el pecho. Presentaba un corte de 15 centímetros de longitud y tres de profundidad a la altura del corazón.
NAVAJAZOS Y DISPAROS
Otro de los fallecidos también fue apuñalado. El hombre, de origen sudamericano, recibió un navajazo en el abdomen en una reyerta que se inició en un locutorio en la confluencia de las calles de Entença con Consell de Cent la noche del 10 de julio. El hombre fue trasladado con rapidez al Hospital Clínic, donde acabó falleciendo.
Las dos víctimas mortales restantes han muerto por impactos de bala. El primero de ellos traspasó el 6 de julio en Sarrià-Sant Gervasi. El hombre, un español de 47 años, recibió cinco disparos, dos de ellos letales, del presunto atracador de la peluquería que regentaba su mujer en el paseo de Manuel Girona. Un joven intentó robar el establecimiento y se topó con el hombre, que iba a recoger a su mujer. La propietaria del local se había encerrado en una habitación.
TIROTEADO EN PLENA CALLE
El 12 de julio por la noche, otro hombre fue tiroteado en plena calle en Barcelona, concretamente en la calle de Fernando Poo del Poblenou. La víctima, un hombre marroquí de 36 años, recibió cuatro balazos. Presuntamente, el asesino fue un hombre de más de 1,90 que vestía de negro, iba con la cara tapada y huyó con un patinete eléctrico. Aunque la persona fue trasladada con vida a un centro hospitalario, falleció una semana después por las graves heridas.
A las pocas horas de este tiroteo tuvo lugar otro en el barrio de Collblanc, aunque en esta ocasión sin víctimas mortales. Los Mossos d'Esquadra están investigando si existe relación entre los dos casos y si podría tratarse de un ajuste de cuentas entre dos bandas. El fallecido del Poblenou llevaba 3.480 euros en una mochila.