Los Mossos d'Esquadra han detenido en el barrio Gòtic de Barcelona a un narcotraficante que captaba a mujeres en locales de ocio nocturno de la ciudad con el propósito de convertirlas en correos de droga para su banda. Esta acción policial se enmarca dentro del dispositivo Oris.
Según ha informado la policía catalana este viernes, el narcotraficante, de nacionalidad tanzana y de 51 años, tenía una orden de búsqueda y detención por pertenencia a grupo criminal por tráfico internacional de drogas y ya ha ingresado en prisión.
UNA BANDA MUY BIEN ORGANIZADA
El narcotraficante formaba parte de un grupo criminal que la policía autonómica desarticuló justo cuatro días antes de la declaración del Estado de Alarma por la pandemia del Covid-19.
Esta organización captaba mujeres en locales de ocio nocturno de la ciudad condal para convertirlas en correos de drogas a cambio de dinero. Durante un par de años, la banda habría estado realizando de manera periódica la importación de heroína proveniente de África (Tanzania) y cocaína desde Sudamérica (Colombia).
UNA QUINCENA DE DETENCIONES
Con esta detención, que tuvo lugar el pasado 5 de abril, se da por cerrada la investigación, que arrancó el mes de febrero del 2019.
Durante este tiempo, se ha detenido a 15 personas, de las que 11 ingresaron en prisión, se han registrado 11 puntos de venta y domicilios y se han intervenido 1,35 kilos de cocaína y 1,5 kilos de heroína, valorados en el mercado ilícito en 150.000 euros.
TRES DE ELLAS, MUJERES
Durante la investigación se han identificado hasta tres mujeres utilizadas como correos por esta organización, aunque no se descarta que haya más.
Les ofrecían entre 3.000 y 4.000 euros para hacer el viaje y trabajar para el grupo criminal. Las tres mujeres habían sido captadas en locales musicales de Barcelona directamente por el ahora detenido.
LOS NARCOPISOS, UNA DE LAS CLAVES
La primera fase de la investigación permitió detectar que los responsables de la importación de la droga tenían vínculos con los vendedores finales, que la distribuían desde narcopisos de la capital catalana.
El ahora detenido sería el enlace entre los responsables del grupo, que importaban la heroína desde Tanzania, y los responsables de los narcopisos, desde donde se distribuía la droga a consumidores locales, mediante la venta de dosis que costaban entre tres y cuatro euros.