Maite Giménez es la portera de un edificio cercano al contenedor del Eixample en el que encontraron un cadáver descuartizado. Esta mujer se quedó dentro del cordón policial mientras iba a buscar el desayuno y pudo ver, en primera persona, el trágico suceso. "No me puedo creer que haya pasado algo así en un barrio tan tranquilo como éste", lamenta a Metrópoli.

Tal como explica ella misma, el martes por la mañana, hizo una pausa de cinco minutos para ir a buscar un bocadillo en un bar que hay en el cruce entre la avenida de Roma y la calle de Casanova, que es el punto en el que hallaron el cuerpo. En cuestión de pocos minutos, empezaron a llegar efectivos policiales y acordonaron la zona, quedando ella dentro con el indigente que descubrió el torso y el trabajador que le ayudó a abrir la maleta para comprobar qué había dentro.

ENVUELTO EN UNA BOLSA

Maite asegura que el torso estaba envuelto en una bolsa de plástico dentro de la maleta. Fuentes policiales explican a Metrópoli que el tipo de bolsa que se suele usar en este tipo de crímenes son las típicas de jardinería. Esto se hace con el objetivo de no dejar rastros de sangre. No obstante, en este caso, aún no se ha corroborado que se haya usado este tipo de material. 

Según explica la portera, el mismo día de los hechos, los Mossos d'Esquadra la interrogaron, tanto a ella como a los vecinos del edificio en el que trabaja. Los agentes se entrevistaron con las personas que, desde cuyos domicilios, se puede ver la calle donde están ubicados los contenedores. A Maite, al ser la portera, le hicieron todo tipo de preguntas: desde si ha observado algo sospechoso por la zona hasta si ha visto a alguien sacando maletas del piso. 

EN BUSCA DE RESTOS DE SANGRE

"Justo había una vecina haciendo una mudanza y le ayudé a sacar las maletas", explica Maite a Metrópoli, dejando claro que no hay correlación entre esta mudanza y el hallazgo de la maleta, sino que se trata de una mera casualidad. Los agentes la acompañaron hasta la planta de arriba en busca de restos de sangre que pudieran conducirlos a alguna pista, pero no encontraron nada.

A la derecha, los dos hombres que han encontrado el cadáver descuartizado del Eixample / CEDIDA

IDENTIFICACIÓN DEL CADÁVER

La policía autonómica ya le ha adelantado que le pedirán las imágenes de las cámaras de seguridad para ver si encuentran alguna pista que los puedan conducir hasta el presunto autor de los hechos, una tarea que está siendo complicada porque aún no tienen el cadáver identificado. Una investigación de estas características es larga y laboriosa y, hasta que no tengan el nombre de la víctima, es muy complicado avanzar.

PUZZLE SIN RESOLVER

Según explican fuentes policiales, un crimen de estas características "es un puzzle con muchas piezas pequeñas en el que aún no se ve el final". Para poder solucionar este puzzle, la Unidad de Investigación Policial de la Región Policial del Área Metropolitana de Barcelona revisa las cámaras de seguridad de todo tipo de comercios y locales de la zona. El contenedor en el que han hallado el cuerpo se vacía cada día y, por lo tanto, es más que probable que lo hayan escondido la noche del lunes al martes

Encuentran un cadáver en un contenedor del Eixample / MA

CÁMARAS DE SEGURIDAD

"Un torso masculino puede pesar entre 40 y 50 kilos y la boca de los contenedores está a un metro y medio de altura. Para poder mover ese peso, hay dos posibilidades: o que lo hayan hecho entre un mínimo de dos personas, o que sea solo una, pero de complexión muy fuerte", explican las fuentes consultadas, que han aprovechado la ocasión para remarcar la importancia de la visualización de las cámaras, que serán un factor clave para resolver este rompecabezas.

En este punto de la investigación, el papel más importante lo tienen los forenses, que están trabajando a contrarreloj para encontrar algún rasgo identificativo del cuerpo. Saber si tiene tatuajes, prótesis u operaciones son elementos que pueden ayudar a saber su identidad. El tipo de corte con el que descuartizaron el cuerpo también puede dar muchos detalles: "Hay dos maneras 'típicas' de hacerlo: o con una sierra eléctrica (hecho que puede llamar la atención de los vecinos) o con una sierra manual".

"LO HAN MATADO CONSCIENTEMENTE"

"La manera más sencilla de identificar un cadáver es a través de las huellas, los dientes y la cabeza. Este cuerpo no tiene ninguno de estos elementos. La persona que lo ha matado lo ha hecho muy conscientemente. Esta investigación será larga y complicada", concluyen las fuentes policiales consultadas por Metrópoli.

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