Indemnizan a la familia de un joven de 15 años fallecido por una pericarditis no diagnosticada

L'Institut Català de la Salut (ICS) indemnizará a la familia de un joven de 15 años que murió por una pericarditis purulenta que no le diagnosticaron. Aunque acudió a urgencias del hospital Vall d'Hebron, no se le hizo ninguna prueba diagnóstica y todos los facultativos que le atendieron le dijeron que tenía “un virus”.

El 25 de diciembre, el joven falleció a causa de un colapso con pérdida de conciencia y parada cardiorrespiratoria.

LE RECETARON IBUPROFENO Y PARACETAMOL

La madre del chico le llevó al médico de cabecera el 20 de diciembre del 2018, cuando el joven empezó a sufrir dolor de garganta y de estómago, dolor muscular, náuseas y vómitos y dificultades para respirar. En esta visita únicamente se le recetó paracetamol. Al día siguiente el dolor de espalda empeoró y se incrementaron las dificultades respiratorias, acompañadas de rigidez en el cuello, en los brazos y mocos de aspecto verdoso.

La familia decidió llevar al joven al hospital pero no le sometieron a ninguna prueba. Los médicos determinaron que el chico sufría “una gripe causada por virus de la gripe no identificado" y le recetaron ibuprofeno. La situación del joven siguió empeorando y el pasado 22 de diciembre sus padres llamaron al SEM dos veces porque el chico vomitaba todo lo que ingería.

MURIÓ AL PERDER LA CONCIENCIA

Al ver que el joven no evolucionaba correctamente, en Nochebuena le llevaron de nuevo a Vall d'Hebron, donde de nuevo no le practicaron ninguna prueba diagnóstica y lo volvieron a enviar a casa con un informe que decía que sufría una "infección vírica no especificada". 15 horas después, el joven sufrió un colapso con pérdida de conciencia y parada cardiorrespiratoria en su domicilio y murió. El relato de la entidad ha indicado que la autopsia determinó que la muerte se debió a una "insuficiencia cardíaca aguda" por "taponamiento cardíaco" secundario a "pericarditis purulenta".

Además, apuntó que al chico se le extrajo medio litro de líquido purulento. El ICS ha admitido su responsabilidad y ha aceptado indemnizar a la familia, que ha retirado la demanda judicial. Según la asociación El Defensor del Paciente, ésta es "una muerte que podría haberse evitado, si se hubiera desplegado la actividad médica necesaria que requería el paciente". Carmen Flores, presidenta de la entidad, ha asegurado que es necesario advertir a los centros hospitalarios del país "que es imprescindible desplegar todos los medios diagnósticos, no despreciar ningún síntoma y proteger a aquellos que acuden a urgencias, para evitar desenlaces como éste".