Dos cámaras de seguridad de la discoteca Sutton han dejado al descubierto una nueva mentira de Dani Alves. El exfutbolista del Barça, en su recurso para eludir la prisión provisional, asegura que estaba en el baño cuando la víctima entró en el reservado. No obstante, según ha podido saber El Periódico, las imágenes lo desmienten.

Cristóbal Martell, el nuevo abogado del presunto violador, explica que la joven de 23 años es la que se dirige en el baño cuando Dani Alves está en su interior. Dando a entender que fue ella quién lo buscó y que, por lo tanto, las relaciones fueron consentidas. Las cámaras de seguridad podrían poner en entredicho esta versión de los hechos.

DANI ALVES

A pesar de que la calidad de las imágenes no son del todo nítidas, se puede ver un hombre que, a juzgar por su aspecto físico y ropa, podría ser el exfutbolista del Barça. Esto significaría que Dani Alves no estaba en el baño, sino de pie a la puerta del reservado, un lugar en el que hubo contacto visual entre él y la joven de 23 años, tal como explica la defensa de la víctima.

Fotomontaje de Dani Alves y la discoteca Sutton de Barcelona / METRÓPOLI

Una vez más, las pruebas demuestran que la versión de ella tiene coherencia, mientras que la del futbolista cada vez tiene más lagunas. Según la joven de 23 años y la investigación de los Mossos d'Esquadra, Dani Alves empezó a insistir a la víctima para que la siguiera hacia el baño. Ella, sin saber las intenciones del futbolista, lo siguió hasta una puerta, sin saber que en su interior había un baño.

CINCO VERSIONES DISTINTAS

Fue entonces cuando intentó salir pero, presuntamente, Dani Alves se lo impidió y la empezó a agredir tirándola al suelo y abofeteándola. También intentó que le hiciera una felación, pero ella se negó. Después de esto, la violó. El futbolista ha cambiado de versión en cinco ocasiones distintas. Primero dijo que no conocía de nada a la víctima, después que solo hubo tocamientos.

En su tercera versión dijo que mientras estaba en el baño haciendo sus necesidades, ella se le abalanzó para hacerle una felación. Más tarde reconoció que hubo penetración, pero insiste en que fueron relaciones consentidas. En su versión más reciente asegura que fue él quien sufrió la agresión sexual, una versión que, evidentemente, la policía catalana no se cree.

Dani Alves, de naranja, en un entrenamiento del Barça / FCB

RIESGO DE FUGA

Se prevé que en las próximas horas la Audiencia de Barcelona tome una decisión en cuanto al recurso presentado por su nueva defensa, que pide que lo dejen en libertad con cargos. No obstante, teniendo en cuenta sus múltiples mentiras, la carga de las pruebas y el riesgo de fuga, es más que probable que siga entre rejas hasta que se celebre el juicio.

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