Mohamed Z. se ha convertido en la pesadilla de los parkings Saba de Barcelona. Así lo confirman fuentes policiales no oficiales a Metrópoli, que aseguran que este hombre de 42 años de origen palestino suma casi 130 antecedentes, prácticamente todos por robos con fuerza en los aparcamientos del centro de la ciudad.
Su modus operandi suele ser el mismo: rompe los cristales de los coches para robar lo que hay en su interior. Los parkings son su lugar predilecto, aunque a veces también comete este tipo de robos en distintos locales de la ciudad. Las citadas fuentes aseguran que es toxicómano, con aspecto de persona sin hogar. Todo lo que tiene se lo gasta en drogas, aseguran.
LOS ROBOS CON FUERZA, UN PROBLEMA DE SEGURIDAD EN LOS PARKINGS DEL CENTRO
Desde Saba son conscientes del problema que suponen los robos con fuerza en sus espacios: "Tenemos 26 aparcamientos en el corazón de la ciudad, de los más grandes y de los que más presión reciben por el hecho de estar en el centro. Lamentablemente, hay delincuentes que se dedican a hacer este tipo de acciones. Es por este motivo que, en los últimos meses y años, hemos reforzado las medidas de seguridad", afirman fuentes de la empresa que dirige Jordi Díez.
Interior de un parking Saba
También aseguran que colaboran activamente con la Guardia Urbana y los Mossos d'Esquadra para identificar y detener a los ladrones. "Entendemos la seguridad de manera activa y pasiva. Tenemos varios procedimientos abiertos, ya que nos presentamos como acusación particular en muchos casos y estamos presentes en la prevención, detención y hasta los últimos términos", reiteran. No obstante, muchos clientes de Saba víctimas de robos en sus aparcamientos lamentan en las redes sociales la falta de vigilancia en estos parkings privados.
'LA JUSTICIA ES LENTA Y PERMISIVA'
Marc --con un nombre anónimo-- es mosso d'esquadra en Barcelona y conoce de primera mano a los multirreincidentes como Mohamed. Para él, la solución es muy fácil: hay que frenar la reincidencia, "pero la justicia es lenta y permisiva".
"Tenemos dos frentes abiertos: los que residen aquí como Mohamed --casi todos extranjeros que no entran a prisión hasta que llevan decenas o cientos de delitos-- y los criminales de paso. En este segundo grupo, entran delincuentes de origen chileno, albaneses, bosnios, croatas y, cada vez, más europeos de origen marroquí y argelino que delinquen por toda Europa robando relojes de lujo", reitera el agente.
Un vehículo entrando un en parking de Saba / SABA
EL CASO DE MOHAMED, LA PUNTA DEL ICEBERG
Mohamed Z. representa solo la punta del iceberg del problema de seguridad que hay en Barcelona. Según confirman varios trabajadores de los aparcamientos del centro a este digital, los delincuentes multirreincidentes de origen bosnio y chileno también abundan. "Siempre son los mismos, nos conocemos sus caras de memoria. Entran en la cárcel, pero en poco tiempo salen y vuelven a los parkings a seguir robando. Es desesperante", dice Carmen, empleada en un aparcamiento del paseo de Gràcia.
Marc confirma las palabras de Carmen: "Los chilenos roban a los coches de los parkings y cometen hurtos en tiendas y los bosnios roban en los coches de los aparcamientos públicos turísticos". Dentro de los delincuentes de paso, también se encuentran mujeres de origen búlgaro que se especializan en robar móviles y carteras dentro de las tiendas, y rumanos y mujeres bosnias que hacen lo mismo en el metro.
'ES FALSO EL MITO DE QUE ROBAN PARA COMER'
"Volviendo a la reincidencia, si los juicios fueran inmediatos e ingresaran a la cárcel cuando los pillamos 20 veces, bajarían un 50% los delitos. Si entraran a prisión la quinta vez, la cifra se reduciría un 80%. Son unos pocos cientos de personas que roban varias veces al día. Es falso el mito de que roban para comer. También hay que tener en cuenta que los detenemos en un porcentaje bajo en relación con los delitos que cometen. Si roban 100 veces, quizás los pillamos cinco. Las condenas firmes tarda años y los delincuentes de paso nunca entrarán a la cárcel. Los que residen en Barcelona entran cuando ya llevan cientos de crímenes", concluye el agente.
LA REFORMA DEL CÓDIGO PENAL, SIN EFECTOS
La multirreincidencia es uno de los principales problemas de seguridad que hay en Barcelona. Los Mossos d'Esquadra mantienen activado el plan Tremall, que lucha para erradicar este conflicto. El año pasado se saldó con 283 personas detenidas 2.270 veces e implicadas en 5.602 hechos, principalmente robos violentos y hurtos. Los cinco multirreincidentes más activos en Barcelona han sido arrestados 117 veces y acumulan 178 antecedentes. El que se encuentra en el top 1 cuenta con 25 detenciones y 52 antecedentes en tan solo un año.
En agosto del año pasado, entró en vigor la reforma de Código Penal. Esta modificación prevé penas de entre seis y 18 meses de prisión para aquellos que cometan hurtos leves que supongan importes inferiores a los 400 euros de forma reiterada. No obstante, la policía catalana no ha visto ningún cambio significativo en la conducta de los multirreincidentes.
Albert Batlle, teniente de Prevención y Seguridad en el Ayuntamiento de Barcelona, explicó en la última Junta Local de Seguridad que no descartaba pedir una nueva modificación para erradicar la multirreincidencia en la capital catalana.