Los Mossos d'Esquadra y la Policía Nacional han desmantelado una red de trata de blancas y prostitución forzada que operaba en Barcelona. Las fuerzas policiales han detenido, en un operativo conjunto, a ocho personas. También han logrado liberar a otras 14, ocho de las cuales estaban obligadas a ejercer la prostitución, cuatro por delitos contra los derechos de los trabajadores y otras dos por tráfico de seres humanos con finalidades sexuales.
Las 14 personas liberadas, todas de origen latinoamericano, vivían hacinadas y dormían sobre colchones tirados en el suelo de un sótano. El operativo supone el colofón a una investigación de más de tres años. El pasado 14 de febrero se llevaron a cabo hasta siete registros en domicilios, seis de los cuales se cerraron, según explican en un comunicado.
Los líderes, a prisión
En el marco de la operación, se intervinieron también drogas por valor de casi 18.000 euros, además de joyas por valor de 30.000 y documentación diversa. Los dos presuntos líderes de la trama ya han ingresado en prisión. Los delincuentes no solo facilitaban chicas, sino que también vendían drogas.
Los agentes también han cerrado varios prostíbulos y un centro de atención telefónica ilegal que servía para organizar los encuentros sexuales entre las víctimas de la trata y los clientes.
Sobre los ocho detenidos pesan delitos de tráfico de seres humanos, explotación sexual, vulneración a los derechos de los trabajadores, delitos contra ciudadanos extranjeros y pertenencia a grupo criminal. Los tentáculos de esta red se alargaban hasta las provincias de Girona y Tarragona.